El canciller de Venezuela, Julio Borges, aseveró este miércoles que en la sesión del Consejo de DDHH los países expresaron su repudio al régimen de Maduro, tras conocerse el informe de la Misión de Determinación de Hechos. El comisionado insistió en que la crisis venezolana no puede ser vista desde una perspectiva ideológica, sino como un drama humano. Recordó que las prácticas de tortura, tratos crueles y asesinatos no son hechos fortuitos, sino parte de una cadena de mando que dirige Nicolás Maduro.
“La dictadura quedó al descubierto en el Consejo de DDHH, el mundo entero los repudia. Luego del informe de la Misión de Determinación de Hechos ha quedado claro que estamos frente a un sistema criminal que no respeta la dignidad humana y que pretende sostenerse en el poder a fuerza de tortura, desapariciones y ejecuciones. Los países entienden que estas prácticas no son fortuitas, sino parte de una cadena de manda que encabeza Nicolás Maduro”, sostuvo.
El representante de la política exterior del Gobierno Interino llamó a los países que mantienen posturas indiferentes o de apoyo al régimen a no ver la crisis con un matiz ideológico. “Hay países que se mantienen indiferentes o siguen apoyando al régimen, pese a los resultados de la misión. Nosotros los llamamos a abandonar estas posiciones, este es un asunto humano no ideológico. Estamos frente a un régimen que no respeta los DDHH, han cometido crímenes de Lesa Humanidad”, señaló.
Asimismo, Borges afirmó que la crisis venezolana seguirá siendo protagonista de la Asamblea General de la ONU. “Somos un tema de altísimo interés dentro de la agenda de la Asamblea General de la ONU, incluso en medio de una pandemia como la que vivimos. Los presidentes de la región han levantado su voz en nombre del pueblo venezolano, nosotros se lo agradecemos”.
Por último, insistió en la necesidad de continuar presionando en todas las instancias internacionales para lograr que la justicia se imponga sobre los responsables de las graves violaciones a los DDHH.