Un grupo de científicos encabezados por Xiulin Ruan, de la Universidad de Purdue (EE.UU.), desarrolló una nueva pintura blanca que puede reflejar el 95,5% de los fotones que la impactan, y de tal manera enfriar las superficies pintadas con ella hasta que alcanzan una temperatura inferior a la de su entorno, incluso bajo la luz solar directa. Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista Cell Reports Physical Science.
No es un secreto que los objetos blancos reflejan más la luz, por lo que se calientan menos. A lo largo de los años se han desarrollado muchas pinturas blancas resistentes al calor que contenían vidrio, teflón o dióxido de titanio, pero todas ellas reflejan entre el 80% y 90% de la radiación solar y no son capaces de enfriarse hasta una temperatura inferior a la ambiental.
La nueva pintura acrílica, en cambio, sí puede hacerlo. El secreto está en su composición, que en vez del dióxido de titanio incluye partículas de carbonato de calcio de diferente tamaño que, además de ser más baratas, absorben menos rayos ultravioleta y como consecuencia se mantienen frías durante más tiempo. La matriz de la pintura tiene también un pico de resonancia vibratoria que le permite difundir una gran cantidad de calor mucho más rápido que otras pinturas refrigerantes.
Tras dos días de pruebas en diferentes lugares y bajo diferentes condiciones climáticas, los científicos descubrieron que la pintura podía reflejar el 95,5% de la luz solar. La muestra de pintura se mantuvo al menos 1,7ºC por debajo de la temperatura ambiente bajo los rayos directos del sol y 10ºC por debajo durante la noche.
Durante otra prueba el equipo de investigadores pintó parte de un dibujo con la nueva pintura y el resto con una capa de otra pintura blanca del mismo grosor. Gracias a una cámara infrarroja, pudieron constatar una importante diferencia de temperaturas entre los dos materiales.
“Es una tarea persistente desarrollar una solución de enfriamiento radiativo hasta debajo de la temperatura ambiente que ofrezca una forma de pintura de matriz de partículas de una sola capa que sea conveniente y de alta fiabilidad”, afirmó Xiulin Ruan.
Los autores del estudio creen que esta innovación puede ayudar no solo a enfriar edificios, sino también a ahorrar electricidad durante los períodos de calor, favoreciendo así al medioambiente.
“Esta pintura de enfriamiento puede incluso usarse para combatir el cambio climático, ya que repele la luz solar e irradia el calor al espacio,” comentó Ruan.
Ahora, antes de comercializar el proyecto, los investigadores planean probar la resistencia de la pintura en diferentes condiciones para garantizar su función.