El rey Felipe VI representará a España en la toma de posesión del presidente de Bolivia, Luis Arce, el 8 de noviembre un acto al que también irá al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias.
El rey, como es habitual en estas ocasiones, viajará acompañado por la ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, según consta en las agendas oficiales de ambos. Por su parte, fuentes del equipo de Iglesias han dicho que éste “encabezará la comitiva del Gobierno”.
Iglesias celebró el resultado de las recientes elecciones generales en Bolivia con la victoria de Luis Arce, que a su juicio supusieron una “lección ciudadana al golpismo”.
“Dejaron votar a los bolivianos y lo han vuelto a decir muy claro. Nueva victoria histórica del Movimiento al Socialismo y lección ciudadana al golpismo. Felicidades presidente”, señaló en Twitter para destacar el resultado del partido del expresidente Evo Morales.
De este modo, el vicepresidente segundo estará también con el rey Felipe VI, que representará a España en los actos de toma de posesión de Arce los días 7 y 8 de noviembre.
Será la cuarta ocasión en que el Gobierno decide enviar al rey para representar a España en la toma de posesión de un presidente iberoamericano, después de los de México en 2018, Panamá en 2019 y Uruguay a principios de 2020.
Como príncipe de Asturias, Felipe VI había acudido a un total de 69 tomas de posesión de presidentes iberoamericanos entre 1996 y 2014 pero desde su proclamación como Rey esta tarea recayó en distintas personalidades. En algunas ocasiones viajó su padre, Juan Carlos I, que desde junio de 2019 ya no hace actos oficiales, y en otras los presidentes de las Cámaras.
Cerrar la crisis con Bolivia
La presencia del rey da muestra de la relevancia que el Gobierno concede a las relaciones con Iberoamérica, en este caso con Bolivia, en especial teniendo en cuenta que los dos países se encuentran aún en proceso de restaurar la normalidad de sus relaciones tras los incidentes del pasado diciembre, que se saldaron con la expulsión de todos los diplomáticos de ambos países.
Fue cuando el Gobierno de Jeanine Áñez acusó a dos diplomáticos españoles de tratar de ayudar a huir a colaboradores del expresidente Evo Morales que estaban refugiados en la Embajada de México.
Las ministras de Exteriores de ambos países acordaron en febrero normalizar las relaciones y comenzaron a acreditar diplomáticos. Este mismo octubre, el Gobierno español ha enviado a La Paz a un “encargado de negocios con cartas de gabinete” para “fortalecer” la presencia diplomática antes de las elecciones del 18 de octubre, pero la normalización completa, elevando al diplomático al rango de embajador, solo llegará tras la toma de posesión de Arce.
El nuevo presidente tomará posesión menos de un mes después de haber ganado las elecciones para sustituir a la presidenta interina Jeanine Áñez. Su Gobierno lleva en el puesto un año, desde la renuncia de Evo Morales tras unas elecciones que fueron rechazadas por la OEA y que motivaron protestas de la oposición con el apoyo del Ejército.
Por su parte, en el seno de IU han llegado invitaciones de cara a la toma de posesión para Maite Mola, en su calidad de vicepresidenta del Partido de la Izquierda Europea (PIE), para el eurodiputado Manu Pineda, para Fran Pérez, como responsable federal de Política Internacional de IU y para Enrique Santiago en su doble calidad diputado estatal y Secretario General del Partido Comunista de España (PCE).
No obstante, desde la formación han explicado que aún no está decidida la delegación definitiva que irá al país iberoamericano.
¿Morales y Maduro?
Arce, candidato del MAS, el partido de Morales, ha ganado las elecciones en primera vuelta. Sin embargo, el Ministerio de Exteriores saliente ha informado de que no extenderá invitaciones al exmandatario Evo Morales ni al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
En un comunicado, la cartera que lidera Karen Longaric ha manifestado que, a su juicio, Morales ha sido “hostil” al proceso democrático boliviano, antes de agregar que “su presencia en el país generará tensión social y política”.
En referencia a Maduro, el Ministerio de Exteriores boliviano ha puntualizado que la nación andina reconoce al Ejecutivo del presidente encargado venezolano, Juan Guaidó, como el Gobierno legítimo del país caribeño.
No obstante, ha matizado que su decisión es la de no extender invitaciones a ambos mandatarios, pero han reconocido que el futuro gobierno de Arce, que es el anfitrión de la toma de posesión, ha manifestado “su deseo” de invitarles.