Un número sin precedentes de más de 16 mil apartamentos están vacíos en Manhattan y 4 mil en Brooklyn, a pesar de la caída en los precios y el mejoramiento de los beneficios ofrecidos a los potenciales inquilinos, según un nuevo informe.
Por: El Diario NY
El inventario de unidades desocupadas en Manhattan alcanzó un máximo de 16,145 el mes pasado, más de tres veces más que hace un año y por encima de las 15,923 vacantes registradas en septiembre y 13,117 en julio, según el último Informe Elliman de octubre. Los números son los más altos en 14 años, acotó New York Post.
Nueva York se mantiene como el estado con más muertes por coronavirus en todo el país (casi 34 mil confirmadas) y NYC además ha vivido un repunte en la criminalidad y en el trabajo desde casa, acelerando un éxodo que ya se estaba notando desde al menos 2018.
Irónicamente, también ha crecido el número de personas sin hogar, creando un círculo vicioso en el deterioro de la calidad de vida, reconocido por el propio gobernador Andrew Cuomo, tema además comentado en los recientes debates presidenciales entre Donald Trump y Joe Biden.
Este año los precios de los alquileres se han desplomado en diversos puntos de Nueva York, incluido Manhattan, el condado tradicionalmente más caro en EE.UU., donde el precio medio fue de $3,100 dólares en octubre, significativamente más barato que hace un año: $3,595.
La baja en los precios y otras concesiones de los caseros han funcionado para algunos, permitiendo un ligero repunte: en octubre se firmaron 5,641 nuevos contratos de arrendamiento en Manhattan, 12.4% más que el mes previo.
Las vacantes también aumentaron en Brooklyn, que tuvo 4,361 unidades vacías en octubre, un aumento del 207% desde el año pasado. A diferencia de Manhattan, allí se firmaron menos nuevos contratos de arrendamiento de septiembre a octubre.
En tanto en el noroeste Queens, de septiembre a octubre el número de apartamentos vacíos subió 5%, alcanzando 645 unidades vacías el mes pasado. Y los precios medios de alquiler también cayeron a $2,600 dólares, en comparación con $2,945 hace un año.
“Las firmas de nuevos contratos de arrendamiento y los alquileres han seguido cayendo desde que terminó el confinamiento en junio”, resaltó el informe. Ahora, Nueva York enfrenta una segunda ola de la enfermedad, lo que podría agravar el panorama. Además, el invierno es tradicionalmente la época de menos mudanzas.
Sin sorpresa, ante la pandemia y el aumento de las compras por Internet, también la desocupación de locales comerciales y oficinas ha aumentado dramáticamente, en una ciudad llena de rascacielos, la mayoría espacios laborales.