Un día de furia vivió en la cárcel Christian Brueckner, el principal sospechoso en la desaparición de Madeleine McCann. Su violenta reacción provocó que terminara con múltiples lesiones.
Por Página 7
Según consigna el diario electrónico The Sun, todo comenzó cuando al sujeto lo acusaron de ensuciar su celda con yogur y bloquear el inodoro con papel higiénico.
“Él reaccionó con enojo y cuando se negó a ponerse los grilletes hubo una pelea muy violenta (con los guardias) y se lastimó”, describió su abogado Friedrich Fulscher.
De acuerdo a los antecedentes, el imputado se enfureció al ver que una funcionaria lo estaba grabando con su celular. “Se enojó por ser filmado y se quejó”, indició una fuente del juzgado de Braunschweig.
En este contexto, el representante dijo al sitio de noticias inglés, que Christian B había sufrido heridas graves tras el enfrentamiento. Asimismo, “ha dejado una cosa muy clara: quiere que alguien pague por lo sucedido“.