“Estamos trabajando con ellos para brindarles cualquier tipo de asistencia ahora que han identificado algunos de los desafíos de producción”, dijo Azar en una sesión informativa el miércoles.
Las negociaciones se producen después de que Pfizer le dijera a la administración Trump que otros países se apresuraron a comprar la mayor parte del suministro que estará disponible en el segundo trimestre del año. El gobierno federal rechazó una oportunidad en octubre de duplicar su compra de 100 millones de dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech, la primera autorizada para su uso en los Estados Unidos, por desacuerdos sobre las fechas de entrega.
Los funcionarios federales han insistido en que tienen dosis suficientes con otras vacunas que probablemente recibirán autorización de emergencia, incluida la vacuna Moderna que se espera que los reguladores aprueben en los próximos días.
Azar señaló que el gobierno federal ha estado más involucrado en el desarrollo y la fabricación de las otras cinco vacunas contra el coronavirus que aceptaron fondos de investigación del gobierno, lo que Pfizer rechazó.
Eso dificultó la intervención del gobierno federal cuando Pfizer tuvo problemas de producción, dijeron funcionarios de salud.
“Parte de nuestras discusiones en curso es remediar eso y obtener una mejor visibilidad de lo que están haciendo, los desafíos que enfrentan, porque asumieron compromisos importantes con nosotros y los demás”, dijo Azar.
El director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, dijo el lunes que la compañía podría proporcionar 100 millones de dosis adicionales en el tercer trimestre del año y confirmó las negociaciones para entregar la vacuna adicional antes.
“Estamos trabajando en colaboración con ellos para asegurarnos de que podamos encontrar formas de producir más o asignar las dosis en su segundo trimestre también, pero aún no hemos firmado este acuerdo”, dijo Bourla en una entrevista con Sanjay Gupta de CNN. .
Los funcionarios de la administración Trump el miércoles también defendieron su decisión anterior de negarse a comprar vacunas adicionales de Pfizer-BioNTech.
“No compraría algo antes de saber que funciona si tuviera seis oportunidades para que un proveedor le brinde lo que necesita”, dijo Moncef Slaoui, asesor científico jefe de Operation Warp Speed, la iniciativa que supervisa la distribución de vacunas.
Los funcionarios dijeron que están en camino de cumplir con los objetivos iniciales de entrega de vacunas esta semana, con entregas a 636 instalaciones hasta ahora y 886 adicionales previstas para el jueves.
“A medida que avanzamos, queremos aprender lecciones, mejorar rápidamente todo lo que estamos haciendo para poder expandir la distribución todos los días, todas las semanas, todos los meses al pueblo estadounidense”, dijo el general Gustave Perna, director de operaciones de Operation Warp Speed.
Los funcionarios encontraron un obstáculo en las entregas esta semana cuando cuatro bandejas de vacunas entregadas en California y Alabama cayeron por debajo de la temperatura de almacenamiento adecuada en el transporte. Perna dijo que fueron reemplazados mientras los funcionarios examinan si aún pueden trabajar.
Está programada la entrega de 2 millones de dosis adicionales de la vacuna Pfizer-BioNTech la próxima semana, y se asignan 5,9 millones de vacunas Moderna si la vacuna supera los obstáculos regulatorios en los próximos días.
La siguiente ronda de partos incluye centros de atención a largo plazo, el segundo grupo prioritario después de los trabajadores de la salud, en Ohio, Connecticut, Virginia Occidental y Florida.
Los funcionarios de salud también proporcionaron actualizaciones sobre los ensayos clínicos para otras vacunas candidatas.
Johnson & Johnson tiene casi 44,000 voluntarios inscritos antes de la fecha límite del jueves, mientras que AstraZeneca ha atraído a 23,000, dijo Slaoui. Se esperan datos preliminares sobre esas vacunas este invierno.