El ex parlamentario, abogado defensor de DDHH y coordinador de la defensa por los derechos civiles Rafael Narváez, fustigó y responsabilizó al régimen por los 5 millones de venezolanos que abandonaron el país huyendo del hambre, fallas permanentes en el suministro de agua, energía eléctrica, gas doméstico, crisis sanitarias, la hiperinflación que devoró los sueldos miserables de los trabajadores, las migajas que reciben nuestros ancianos que deben decidir si comprar 5 pastillas para la hipertensión o comprar medio kilo de cambures y no morir de hambre .
El director de la ONG Derechos Civiles cuestionó la conducta criminal por parte del Ministro de Trinidad y Tobago en contra de todos los venezolanos que intentan entrar a la isla como desplazados y refugiados. Las autoridades de Trinidad los detienen para luego ser deportados lanzándolos al mar sin ninguna protección con el riesgo de pérdidas de vida como el caso más reciente donde ya han aparecido 28 cadáveres flotando en el mar violando los pactos internacionales en materia de refugiados, desplazados y la convención de Viena, que obliga a los países signatario a dar la protección social, alimentación y jurídica a migrantes.
A su juicio, “Estamos en presencia de la debilidad de ACNUR, la OEA y la ONU como organismos internacionales que no haber asumido la defensa de los migrantes venezolanos y denunciar ante la CPI al Ministro de Trinidad y Tobago por cometer Crímenes de lesa humanidad establecidos en el artículo 7 del estatuto de Roma”.
“El abogado defensor DDHH cuestionó a los países receptores de migrantes venezolanos por la falta de humanidad, pues en una oportunidad Venezuela les recibió con los brazos abiertos y les permito gozar de todos los derechos y ahora observamos cómo nuestros hermanos son maltratados y despreciados con xenofobia”, acotó.
Finalizó diciendo, el régimen “violador sistemáticamente de los DDHH con razones para la CPI en ser investigado por Crímenes de Lesa Humanidad no tiene alma ni piedad para con los venezolanos sufridos”.
Nota de prensa.