El presidente de Chile, Sebastián Piñera, fue multado el pasado viernes con el equivalente a unos 3.500 dólares por no cumplir con la disposición sanitaria sobre el uso de mascarillas en espacios públicos y posar para una foto con transeúntes en la playa de Cachagua.
Piñera pidió disculpas por su acto y presentó una “autodenuncia” luego que la imagen se viralizara en las redes sociales a principios de diciembre.
El mandatario explicó que caminaba solo por la playa cerca de su casa en la elegante localidad costera de Cachagua cuando una mujer lo reconoció y le pidió tomarse una foto con él. La selfie muestra al presidente y a la mujer a poca distancia, sin mascarillas.
La pandemia llegó a un punto crítico en mayo y junio, pero luego fue perdiendo fuerza. Sin embargo, los casos están aumentando nuevamente, lo que ha generado nuevas restricciones y cuarentenas.
El pasado miércoles, Instituto de Salud Pública de Chile (ISP) autorizó el uso de emergencia de la vacuna contra el coronavirus de Pfizer y BioNTech.
Chile se convirtió así en el primer país sudamericano en aprobar la inoculación, que será aplicada a la población mayor de 16 años.
La decisión chilena fue tomada de manera unánime por un panel de 22 médicos de distintas especialidades y químicos farmacéuticos encargados de analizar los estudios y resultados de la vacuna de Pfizer.
“Esta comisión de expertos se pronuncia favorablemente a la solicitud de autorización de uso excepcional por urgencia sanitaria solicitada para la vacuna BNT 162b2 presentada por Laboratorio Pfizer”, dijo Caroline Weinstein, miembro del panel.
La “solicitud para autorización provisional”—como se llama en Chile la aprobación de de emergencia— es un mecanismo que está determinado en el artículo 99 del Código Sanitario y que se usa para cubrir una necesidad urgente de naturaleza colectiva, en este caso la necesidad de proteger a la población frente al covid-19.