A sus 22 años, la poeta Amanda Gorman, elegida para leer en la ceremonia de investidura del presidente electo Joe Biden, ya tiene experiencia escribiendo para actos oficiales. “Como que me he tropezado con este género. Ha sido algo que me ha dado mucha gratificación emocional, escribir algo con lo que pueda hacer sentir a la gente conmovida, aunque sea por una noche”, dice Gorman. La residente de Los Ángeles ha escrito para eventos que incluyen una celebración del 4 de Julio, el Día de la Independencia estadounidense, con la Boston Pops Orchestra, hasta la inauguración en la Universidad de Harvard University, su alma mater, del rector Larry Bacow.
Por Infobae
Cuando recite el próximo miércoles, continuará una tradición — para los presidentes demócratas — que incluye a poetas celebrados como Robert Frost y Maya Angelou. El poema de esta última “On the Pulse of Morning”, escrito para la investidura del presidente Bill Clinton en 1993, llegó a vender más de un millón de ejemplares cuando se publicó en formato de libro. Entre los lectores recientes han estado Elizabeth Alexander y Richard Blanco, con quienes Gorman ha estado en contacto. “Los tres estamos juntos en mente, cuerpo y espíritu”, dice.
Gorman es la poeta inaugural más joven que se recuerde, y ya hecho noticia antes. En 2014, fue nombrada la primera Poeta Joven Laureada de Los Ángeles, y tres años después en la primera Joven Poeta Laureada Nacional. Ha aparecido en MTV, ha escrito un homenaje a deportistas negros para Nike, y tiene un acuerdo con Viking Children’s Books para publicar dos libros. El primero, el texto ilustrado Change Sings, sale en los próximos meses.
Gorman dice que el comité de investidura de Biden la contactó el mes pasado. Ha conocido a numerosas figuras públicas, como la exsecretaria de Estado Hillary Rodham Clinton y la ex primera dama Michelle Obama, pero dice que aún está por conocer a los Biden. Los Biden, aparentemente, estaban al tanto de ella: Gorman cuenta que personal del comité le dijo que la futura primera dama, Jill Biden, la había recomendado.
Su poema inaugural se titula “The Hill We Climb”, pero declinó adelantar algunos versos. Dice que no le dieron instrucciones específicas sobre qué escribir, pero que la exhortaron a enfatizar la unión y la esperanza y no “denigrar a nadie” o declarar “la bruja ha muerto” ante la partida del presidente Donald Trump. El ataque de la semana pasada al Capitolio estadounidense por parte de simpatizantes de Trump que buscaban anular los resultados de las elecciones representó un desafío para mantener un tono positivo, pero también una inspiración.
Gorman dice que le dieron cinco minutos para leer y que, antes de lo que ha descrito en entrevistas como “la insurrección confederada” del 6 de enero, tenía el equivalente a tres minutos y medio. La versión final llega a unos seis. “Ese día me dio una segunda ola de energía para terminar el poema”, dice Gorman, agregando que no se referirá directamente a ese día pero que lo “tocará”. Dice que los sucesos de la semana pasada no cambiaron drásticamente el poema en el que venía trabajando porque no la sorprendieron.
“El poema no es ciego”, dice. “No da la espalda a la evidencia de discordia y división”. En otros escritos, Gorman ha honrado a sus ancestros, reconocido y celebrado su propia vulnerabilidad (“Gloriosa en mi fragmentación”, ha escrito) y abordado problemas sociales. Su poema “In This Place (An American Lyric)”, escrito para la lectura inaugural de la poeta laureada estadounidense Tracy K. Smith en 2017, condena la marcha racista en Charlottesville, Virginia y mantiene su forma de arte como una fuerza para la democracia.
Gorman tiene un raro estatus como poeta, y sueña con otras ceremonias. Le encantaría leer en los Juegos Olímpicos de 2028, que serán en Los Ángeles, y en 2037 no le importaría encontrarse en una posición aún más especial en la investidura presidencial, como la nueva mandataria. “Le diré a Biden que estaré de regreso”, dice riendo.