Un kamikaze se inmoló en una calle comercial del centro de Bagdad este jueves por la mañana, informó la televisión estatal, añadiendo que hay “muertos y heridos”, aunque no dio más precisiones por el momento.
El atentado se produjo en la plaza Tayaran, un punto muy concurrido de la capital, al que acudieron rápidamente numerosas ambulancias. En este mismo lugar, un atentado suicida se cobró la vida de 31 personas hace tres años.
Los atentados suicidas en Bagdad, en un tiempo habituales, son actualmente raros y el último tuvo lugar en junio de 2019.
El ataque de este jueves no ha sido reivindicado pero recuerda al modus operandi del grupo yihadista Estado Islámico (EI), que ocupó cerca de un tercio de Irak en 2014 y durante tres años, hasta que las autoridades anunciaron que habían retomado el control sobre la totalidad del territorio.
Desde entonces, células yihadistas resisten, latentes, en zonas montañosas y desérticas del país. Sin embargo, el EI solo ha reivindicado hasta ahora ataques sin importancia, perpetrados generalmente por la noche contra posiciones militares en zonas aisladas, lejos de las ciudades. AFP