Río de Janeiro, una de las ciudades más afectadas por la pandemia del covid-19 en Brasil y en el mundo, suspenderá provisionalmente a partir del miércoles su campaña de inmunización por falta de vacunas, anunció este lunes el alcalde de la segunda mayor urbe de Brasil, Eduardo Paes.
La ciudad más emblemática del país se convierte así en la primera en confirmar oficialmente la interrupción de la vacunación por falta de antídotos, algo con lo que han amenazado desde hace días algunos gobiernos regionales y municipales.
La suspensión de la campaña de vacunación se produce en momentos en que Brasil enfrenta una segunda ola de la pandemia más virulenta y en que el promedio de muertes en los últimos catorce días se mantiene por encima de las 1.050 diarias por séptimo día consecutivo, algo que no ocurrió ni el pico de la primera ola.
Brasil comenzó su campaña de inmunización el 18 de enero con 10 millones de vacunas de la farmacéutica Sinovac importadas de China y otras 2 millones de dosis del laboratorio AstraZeneca importadas de India.
Con las dosis disponibles, Brasil vacunó hasta ahora a poco más de 5 millones de personas (teniendo en cuenta que son dos dosis por inmunizado), el equivalente al 2 % de su población.
Todas las dosis disponibles fueron distribuidas y los municipios están ahora a la espera de que los laboratorios públicos Fiocruz y Butantan comiencen a distribuir los nuevos lotes de vacunas que están envasando con la materia prima importada desde China e India.
«Recibí la noticia de que no llegaron nuevas dosis. Tendremos que interrumpir nuestra campaña. Hoy vacunaremos a las personas con hasta 84 años y el martes a los mayores de 83 años», afirmó Paes en un mensaje que publicó en las redes sociales, en el que admitió que el miércoles ya no tendrá vacunas disponibles.
EFE