Son 400 años llenos de historia, experiencias y cuentos que suma el Dulce Corazón de Jesús de Petare, un barrio satanizado por el mundo como “zona de guerra”.
lapatilla.com | Katerín García
No todo en Petare es delincuencia, como muchas veces lo pintan, esta, siendo la barriada más grande de América del Sur, después de las Favelas en Brasil, tiene mucha tela que cortar, ya que hoy en día aún permanecen sucesores de las familias fundadoras del pueblo en los años 1600.
Fue fundado en 1621, bajo el nombre de Dulce Corazón de Jesús de Petare, sobre una colina bordeada por la quebrada El Oro y los ríos Caurimare y Guaire, siendo un pueblito de parada para los viajeros y un escape “sanador” para los caraqueños de antaño.
El sitio fue considerado durante décadas centro de mercaderes, pues a su alrededor existían innumerables haciendas que debido a la fertilidad de sus tierras producían cosechas de cacao, café, maíz, caña de azúcar y muchas otras siembras que eras atesoradas.
No todo fue color de rosa, en esas mismas tierras corrió sangre de nuestros antepasados cuando antes de su colonización, Los Mariches, grupo indígena de familia lingüística Caribe, habitaron la zona hasta 1573 y posteriormente los sucesos que forjaron la Independencia de Venezuela se adueñó del sitio obligando a los campesinos a desertar por las guerras.
Y aunque nos encantaría seguir echándoles el cuento, lo mejor es escucharlo en voz de un habitante cuyo linaje es íntegro de la parroquia, el señor Fran Suárez.
Además, te dejamos un puntual recorrido que solo brinda un respiro de paz en Zona Colonial del barrio más grande y “peligroso” de Venezuela, Petare.
Feliz aniversario Petare