El presidente del partido Un Nuevo Tiempo (UNT), Manuel Rosales Guerrero afirmó que la situación económica de Venezuela es inmanejable, en relación a la nueva medida del Banco Central de Venezuela (BCV) que incorpora tres nuevos billetes al Cono Monetario vigente pero inexistente.
El fundador de la tolda azul, recordó que un dólar en 1998, cuando Hugo Chávez ganó las elecciones valía 565 bolívares, mientras que ese mismo dólar equivalía para inicios de 2021 a 1.750.000 bs.
Asimismo, Rosales expone que a lo largo de los últimos años al destruido bolívar le han quitado 8 ceros. “De forma que sin ni siquiera contemplar otros factores, ese mismo dólar de 1998 equivale hoy a la impronunciable cantidad de Bs 163.500.000.000.000.
Sin embargo, fuera del maquillaje de la eliminación de ceros, no se han tomado ninguna de las medidas razonables que aconseja la ciencia económica o la política monetaria para frenar la absurda devastación de la moneda”.
A juicio del líder zuliano, nos encontramos ante la increíble realidad de que es imposible que funcione la contabilidad de ninguna empresa con tantos dígitos. Por lo que, afirma que “la situación ya es inmanejable y se prevé que nuevamente habrá que quitarle 6 ceros más a nuestra ya casi inexistente moneda, con lo cual el mismo dólar que equivalía a Bs 565 en 1998, pasaría a valer Bs 16.350.000.000.000.000.000; es decir dieciséis trillones cincuenta mil billones de bolívares de los de 1998 (latinos, no anglosajones)”.
Rosales aseveró que sin duda alguna Venezuela seguirá padeciendo de la mayor hiperinflación del planeta. “Según el FMI la inflación más alta del mundo en el 2020 la tuvo Venezuela con 6.500% y la segunda mayor la sufrió Sudán con 103%, país africano que se encuentra sumido en una guerra”, enfatizó.
Por otra parte, recordó que todo inicia en el 2004 cuando Chávez solicitó un “millardito de dólares de las reservas” con el pretexto de financiar al sector agrícola, “y aunque al principio el Directorio del BCV se negó, en 2005 la Asamblea Nacional (de mayoría chavista) y el Gobierno acordaron cambiar el destino del aporte petrolero y crear un nuevo mecanismo de financiamiento de programas, lo que condujo a modificar la Ley del Banco Central”.
“En la práctica eliminaron nada más y nada menos que la autonomía del Banco Central de Venezuela que prohibía al organismo supeditarse a las directrices financieras del Ejecutivo y más concretamente le prohibía financiar el gasto público”, continuó.
El líder zuliano finalizó reflexionando: “¿Por qué se contemplaba tal prohibición en la ley? pues bien, la razón la estamos viviendo dramáticamente hoy en día. Cuando los Bancos Centrales emiten dinero sin respaldo (lo antes lo llamábamos inorgánico) para financiar el gasto de los gobiernos, la consecuencia inevitable es la pérdida de valor de la moneda”. El BCV emite dinero sin ningún valor real porque el bolívar no aparece en ningún marcador internacional y en el país los billetes terminan en los basureros porque a nadie le sirve.
Nota de prensa