Se espera que los compromisos en proyectos en alta mar no solo se recuperen en el futuro, sino que también se espera que su número alcance un nuevo récord en el período de cinco años hacia 2025, acumulando casi 600 proyectos, según un informe de Rystad Energy
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Los compromisos en aguas profundas disfrutarán del mayor crecimiento, ya que su costo ahora se ha vuelto mucho más competitivo frente a las reservas de la plataforma continental totalmente nuevas.
A los efectos de este análisis, hemos definido que un proyecto está comprometido cuando más del 25% de su gasto de capital totalmente nuevo se adjudica a través de contratos.
En intervalos de cinco años, los compromisos totales de proyectos costa afuera disminuyeron en el período 2016-2020 a 355 proyectos, por debajo de los 478 en el período 2011-2015. Desde principios de 2021 y hasta finales de 2025, el pronóstico exacto de Rystad Energy es de 592 compromisos, con un crecimiento en todos los niveles de profundidad del agua: aguas poco profundas (0-125 metros), aguas profundas (125-1500 metros) y aguas ultraprofundas. (más allá de 1500 metros).
Aunque los compromisos de aguas poco profundas tomarán la mayor parte del pastel total de proyectos costa afuera, aumentando a 356 de solo 206 en los últimos cinco años, el aumento es más modesto, alrededor del 10%, en comparación con el recuento de 323 proyectos de 2011-2015. El crecimiento más impresionante es el de los compromisos en aguas profundas, con el número de proyectos aumentando a 181, de 106 en 2016-2020 y 115 en los cinco años anteriores.
Los compromisos en aguas ultraprofundas también aumentarán, pero no en márgenes similares, ya que los costos aún se mantienen. Esperamos unos 55 proyectos desde este año hasta 2025, frente a los 43 de los cinco años anteriores.
“El crecimiento de los compromisos estimulará la creciente demanda de embarcaciones flotantes de producción, almacenamiento y descarga, así como amarres submarinos. La búsqueda de grandes campos nuevos en aguas profundas y remotas se volvió mucho más viable económicamente después de que las tarifas diarias para las plataformas de perforación y los buques de suministro en alta mar cayeran a raíz de la caída del precio del petróleo en 2014 y 2015. Esto ofrece un apoyo significativo para las empresas interesadas en aguas profundas “. dice Rajiv Chandrasekhar, analista de servicios energéticos de Rystad Energy.
El último informe de evaluación comparativa de costos costa afuera de Rystad Energy muestra que la diferencia en el costo de las reservas de la plataforma greenfield en comparación con las aguas profundas se ha reducido drásticamente desde los máximos observados en 2014: de más de $ 5 por barril de petróleo equivalente a solo alrededor de $ 1 / bpe en 2020.
Debido al crecimiento esperado en la actividad de exploración y producción durante los próximos cinco años, se prevé que aumente el número de nuevas instalaciones en alta mar, lo que significa que también se prevé que aumenten los flotadores y los amarres submarinos. Es probable que E&P prefiera los FPSO arrendados a las unidades propias, en base tanto a los datos reportados como a las suposiciones hechas por los operadores. Rystad Energy espera un aumento del 50% en la cantidad de FPSO de propiedad que se espera que se utilicen en los próximos proyectos hasta 2025.
Los amarres submarinos son significativamente menos intensivos en capital en comparación con las tecnologías fijas y flotantes, y también facilitan tiempos de respuesta más rápidos desde el inicio del desarrollo del campo hasta el primer petróleo. Además, la gran cantidad de instalaciones fijas preexistentes ha hecho que sea cada vez más fácil optar por sistemas de producción submarinos que puedan vincularse a estas plataformas. Incluso en aguas poco profundas por debajo de 125 metros, los compromisos submarinos y flotantes probablemente verán que su participación de mercado aumente considerablemente durante los próximos cinco años, aunque las plataformas fijas seguirán siendo la solución dominante para el desarrollo de plataformas.
En términos de gastos nuevos, esperamos que los compromisos de proyectos en el extranjero en 2021-25 valgan más de $ 480 mil millones, eclipsando el recuento de 2016-20 de alrededor de $ 320 mil millones . Sin embargo, esto todavía está bastante lejos del ritmo establecido en el período 2011-15, cuando se contrajeron compromisos por valor de alrededor de 673.000 millones de dólares.
Esperamos que la actividad en aguas ultraprofundas se concentre principalmente en América del Sur, con más del 50% del valor total comprometido, mientras que es probable que Oriente Medio lidere los desarrollos de plataforma con el 40% del valor total. Se pronostica que las inversiones en aguas profundas dependerán menos de cualquier región en particular, con una cuarta parte de los gastos nuevos en Europa.