Las diversas vacunas contra el Covid-19 sin dudas contribuirán a poner fin a la pandemia, pero a la vez seguirán enriqueciendo a las grandes compañías farmacéuticas.
La trasnacional estadounidense Pfizer (PFE), por ejemplo, que cobra menos de $20 dólares por dosis, espera que las ventas de la vacuna que desarrolló con la alemana BioNTech (BNTX) se acerquen a $ 15.000 millones de dólares para fines de este año, con un margen de ganancias de casi el 30%, de acuerdo con un reporte de CNN.
Pero la compañía que realmente más se beneficiará con la vacuna contra el Covid es Moderna (MRN), una farmacéutica también estadounidense, relativamente nueva y que no tenía productos aprobados para la venta hasta 2019. Ese año solo obtuvo $ 60 millones de dólares en ingresos, pero recibió $ 529 millones de dólares por subvenciones y $ 200 millones de las primeras ventas de sus vacunas en 2020.
El pronóstico de ingresos para 2021 es de $ 16.000 millones de dólares, en su gran mayoría por la venta de vacunas. Las acciones de Moderna subieron un 187% en los últimos 12 meses.
Sin beneficios durante la pandemia, pero…
La tercera vacuna aprobada en Estados Unidos, de Johnson & Johnson (JNJ), es la única de una sola dosis y tiene una efectividad un poco más baja que las anteriores, de 85%. La farmacéutica ha dicho que proporcionará la vacuna sin fines de lucro mientras el mundo continúe sufriendo la pandemia, pero eso no significa que la compañía nunca obtendrá dinero con ella.
Se espera que incluso después de que haya pasado la pandemia, las personas necesitarán recibir inyecciones para protegerse de las nuevas variantes.
“Existe un escenario cada vez más probable en el que podría ser necesario en los próximos años reforzar a los pacientes vacunados con COVID-19 con una vacuna que codifique la variante de pico”, dijo el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, en su llamada más reciente con analistas.
Además, Johnson&Johnson también se beneficia del incremento de sus acciones en la bolsa, al igual que Moderna y Pfizer. Es importante tomar en cuenta que la única que no recibió una subvención federal del gobierno de Estados Unidos para producir la vacuna fue Pfizer, que corrió con todos los costos.
Algunos problema y un fracaso
Los problemas que ha enfrentado AstraZeneca (AZN), la vacuna desarrollada por la compañía del mismo nombre y la Universidad de Oxford, también deben beneficiar a las farmacéuticas estadounidenses. La mayoría de los países de Europa había aprobado esa vacuna y apostado por ella como fuente primaria de las inmunizaciones contra el Covid, pero recientemente Dinamarca, Islandia y Noruega, y poco después Alemania, Francia e Italia, suspendieron su uso tras reportes de coágulos de sangre en las personas vacunadas.
La cuarta gran transnacional farmacéutica de EEUU, Merck (MRK), fracasó en su intento de desarrollo de la vacuna, y discretamente entró en convenio con Johnson&Johnson para respaldarla en la producción de la suya.
Por lo general, las vacunas no son tan lucrativas para las biofarmacéuticas.
“Las vacunas contra la influenza son un negocio de menor margen”, señaló a CNN Seamus Fernández, director gerente senior de Guggenheim Securities. Entre las excepciones, sin embargo, está la vacuna Prevnar, que protege a los ancianos de la neumonía neumocócica, “extremadamente lucrativa” para Pfizer. Su costo en Estados Unidos es de más de 100 dólares por dosis, si alguien quiere costearla sin seguro médico.
Un premio en imagen casi incalculable
Más allá de ganancias, las vacunas contra el Covid traen un importante beneficio extra para las biofarmacéuticas que las producen: el reconocimiento de la marca.
“Realmente ha habido un cambio radical en la forma en que la gente los percibe”, señaló Tinglong Dai, profesor de negocios en la Universidad Johns Hopkins. “No son compañías farmacéuticas codiciosas que cobran precios escandalosos. Están salvando al mundo. Son relaciones públicas realmente brillantes”.
De hecho, las medidas para reducir los precios de los medicamentos en Estados Unidos, que estuvieron en la agenda del gobierno de Trump y nunca se concretaron, ni siquiera se mencionan por ahora.