Los candidatos presidenciales peruanos Pedro Castillo y Keiko Fujimori mantuvieron este sábado un duro debate en la plaza de Armas de la localidad de Chota, ubicada a más de 960 kilómetros de Lima, después de haberse retado durante toda esta semana para confrontar su planes de Gobierno de cara al ballotage.
Por Infobae
Tras haber superado un problema de salud que le obligó a suspender sus actividades programadas en Lima, Castillo viajó este viernes hacia Chota, su ciudad natal a la que ha convocado a Fujimori para un primer debate extraoficial.
Durante su primer turno para hablar, Castillo comenzó saludando a los trabajadores en su día, y aprovechó para atacar a su contrincante. “Saludaría también a la señora Fujimori en el día del trabajador pero ignoro dónde ni cuándo ha trabajado”.
Sobre la pandemia del coronavirus, explicó que va más allá del tema sanitario debido al modelo neoliberal. “Asumiendo nosotros el mandato, garantizaremos en primer momento la vacuna de calidad masiva, facultativa, para todos los peruanos”.
Además, aseguró que conseguirá las vacunas necesarias para enfrentar la pandemia, y que en ese camino el viernes se reunió con el embajador de Rusia para tener 20 millones de vacunas en la primera quincena de agosto.
“En nuestro gobierno el enfermo no ira a buscar al Médico, es el estado el que debe acercarse. En nuestro gobierno no podemos lucrar con la salud de los peruanos”, agregó.
Por su parte, la hija del ex presidente, también comenzó su turno para hablar de Salud para atacar a su contrincante: “Saludo a Pedro Castillo, que después de poner tantas excusas finalmente tuve que venir hasta aquí para que podamos hacer un debate de ideas”.
Sobre la pandemia del coronavirus, afirmó: “Tenemos que saber quiénes son los contagiados y hacer una política de rastreo con 70 mil pruebas moleculares al día”. Y confirmó que ella también había tenido conversaciones con el embajador ruso con el objetivo de negociar la compra de vacunas Sputnik, “y con todos los laboratorios”.
“Construiremos a lo largo y ancho del país hospitales”, declaró por su parte Keiko, quien inició su intervención con un saludo a los miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía. “Construiremos 3.000 colegios más como lo hizo mi padre”, agregó. Además, anunció al lanzamiento del programa “bono oxígeno”, a partir del cual el Estado pagará un bono a las familias que perdieron un familiar por COVID-19.
Educación
“Aspiramos a que cada uno de ellos (niños) reciba una canasta tecnológica compuesta por una tablet o una computadora, hasta un celular para que tengan la posibilidad de recibir información directa”, indicó Keiko Fujimori al señalar sus propuestas sobre educación.
Y agregó que su mensaje estaba dirigido a “los que enseñan, no a los que están con licencia sindical y dejaron abandonados a los niños”, en una clara referencia a su rival.
En respuesta, Pedro Castillo esperó su turno y señaló que para ser candidato a presidente del Perú ha solicitado una “licencia” en su trabajo. “Otros para estar aquí tienen permiso del Poder Judicial”, contraatacó.
“En nuestro gobierno la educación será abierta. Desde el espacio del magisterio haremos la verdadera currículo para que nuestros hijos se eduquen en valores”, indicó Castillo, en conjunto con una reivindicación a la educación pública.
Economía
“Una vez que esté la población vacunada, vamos a hacer un programa responsable de destrabar los proyectos en los gobiernos regionales y locales”, afirmó Castillo al iniciar el tercer bloque sobre reactivación económica. Además, se refirió a la reactivación del turismo, y a los créditos a los micros y pequeños empresarios.
Y además, añadió “En nuestro gobierno no habrá importación de lo que el pueblo produce”.
Al turno de Keiko, la fujimorista afirmó: En su intervención sobre economía, planteó un cambio “no hacia atrás, ni un salto al abismo”, sino uno que permita acercar al Estado a los ciudadanos.
La plaza había sido acordonada horas antes por unos 200 policías, mientras cientos de pobladores se agolpaban en los alrededores para observar el debate, transmitido por canales de televisión y que ha acaparado la atención del país.
Al llegar, ambos candidatos se saludaron con un choque de puños y solo se retiraron las mascarillas en sus turnos para hablar frente al micrófono.
El maestro de escuela rural y la hija del encarcelado expresidente Alberto Fujimori encabezaron, con el 18,92% y el 13,40% de los votos respectivamente, el escrutinio de la primera vuelta de las elecciones, el 11 de abril, que contó con un récord de 18 candidatos.
Ambos ingresaron a la plaza acompañados por seguidores y bajo vigilancia policial. Ella vestía la camiseta blanca con franja roja de la selección peruana de fútbol y él su tradicional sombrero de copa alta típico de Cajamarca.
Castillo supera a Keiko en todos los sondeos previos al balotaje, con ventaja de entre 20 y 10 puntos porcentuales.
El país, en recesión a causa de la pandemia y políticamente inestable desde 2016 -tuvo tres presidentes en cinco días en noviembre pasado-, ahora se encamina a un balotaje entre dos postulantes situados en las antípodas y que en conjunto obtuvieron apenas el 32% de los votos en la primera vuelta.
Keiko, de 45 años, defiende el libre mercado mientras Castillo, de 51, aboga por un activo papel económico del Estado, incluso con nacionalizaciones.
El próximo presidente debe asumir el poder el 28 de julio en sustitución del mandatario interino Francisco Sagasti.