El portugués Cristiano Ronaldo dejó atrás este domingo su sequía goleadora de tres partidos y anotó un trascendental doblete en los minutos 83 y 90 para evitar un revés al Juventus en el campo del Udinese y darle un triunfo por 2-1.
Un gol del argentino Nahuel Molina a los diez minutos, tras una grave distracción defensiva del Juventus, dejó contra las cuerdas al cuadro turinés, que fue rescatado en los últimos minutos por un Cristiano que, hasta ese momento, había disputado un partido gris, como el de sus compañeros.
Los de Andrea Pirlo se colocaron terceros en la tabla, empatados con Atalanta, segundo, y Milan, cuarto, mientras que el Nápoles, quinto, está a dos puntos de distancia, a falta de cuatro jornadas para el final.
Todo cambió para el Juventus en el minuto 83, cuando el argentino Rodrigo de Paul, hasta ese momento uno de los mejores de su equipo, desvió con un brazo una falta directa lanzada por Cristiano y el árbitro pitó penalti.
CR7 no tembló desde los once metros, cruzó el disparo y superó al meta Simone Scuffet, titular en sustitución del sancionado argentino Juan Musso, para subir el 1-1 al marcador.
El Juventus apretó con todo y en el 90, un centro colgado por el francés Adrien Rabiot, fue aprovechado de nuevo por Cristiano para anotar de cabeza el gol del definitivo 2-1.
Toda la plantilla juventina corrió a abrazar al luso, que rompió su sequía goleadora y firmó un doblete determinante para evitar que su equipo se hundiera en Udine.
Lleva 27 goles en la Serie A, de la que es máximo artillero, y las opciones del Juventus de clasificarse para la próxima Liga de Campeones pasarán por las dianas de Cristiano.
A partir de la próxima jornada, cuando el Juventus recibirá al Milan en un choque directo de alto voltaje por la “Champions”.
EFE