La familia de Saheb Rao Shinde pensó que lo peor había pasado cuando el hombre de 65 años se recuperó del COVID-19 el mes pasado en su casa en el oeste de India. Pero unas semanas más tarde, el vendedor perdió la vista de un ojo.
Después de que empezó en abril una catastrófica segunda ola de COVID-19 en India, cuya pérdida de vidas por la pandemia asciende a casi 400.000, miles de personas que contrajeron el virus también sufrieron una rara enfermedad fúngica llamada mucormicosis u “hongo negro”.
El país, que registra más de 30,4 millones de infecciones confirmadas por COVID-19 -sólo superado por Estados Unidos- ha reportado hasta ahora más de 40.845 casos de mucormicosis.
Es posible que muchos como Shinde nunca puedan recuperar la vista después de la enfermedad fúngica que causa ennegrecimiento o decoloración en la nariz, visión borrosa o doble, dolor de pecho, dificultad para respirar y tos con sangre.
“Papá estaba en forma y sano, ahora no tiene ganas de comer”, contó la hija Shinde, quien no quiso dar su nombre. “También le han extraído los dientes, es muy triste”.
Shinde, de la árida región occidental india de Marathwada, reanudará el trabajo después de que se recupere, dijo su hija a Reuters en Mumbai.
Reuters habló con varios otros pacientes de mucormicosis en toda la India.
Adesh Kumar, un agricultor de 39 años del estado norteño de Uttar Pradesh, perdió la vista del ojo izquierdo. Tuvo que pedir prestado dinero para pagar las medicinas, crédito que aseguró con una parte de su tierra.
India ordenó en mayo un seguimiento más estricto de la mucormicosis, que agravó los problemas para pacientes con COVID-19, especialmente aquellos en terapia con esteroides y con diabetes.
Los expertos dicen que el uso excesivo de ciertos medicamentos que inhiben el sistema inmunológico podría estar causando el aumento de la infección por hongos.
“Estamos viendo muchos casos de mucormicosis después de infecciones por COVID, ya que se sabe que el propio COVID disminuye la inmunidad”, dijo Charuta Mandke, del departamento de oftalmología del Hospital General Municipal Doctor RN Cooper en Mumbai.
Reuters