La Justicia italiana ha incluido a once nuevos investigados – nueve personas y dos sociedades – por el accidente de una cabina de teleférico en el norte de Italia en mayo pasado, que causó la muerte de catorce personas que viajaban en su interior y en el que sólo se salvó un niño de cinco años, según medios locales.
Los nuevos acusados son en su mayoría directivos y empleados de Leitner, la empresa que se encargaba de las labores de mantenimiento de la instalación y que también ha sido incluida entre los investigados, al igual que la sociedad Ferrovie del Mottarone, que gestionaba el teleférico.
Todos ellos se suman a los tres investigados iniciales por la caída al vacío de la cabina entre el monte alpino de Mottarone y la localidad de Stresa (norte) el pasado 23 de mayo: el propietario de Ferrovie del Mottarone, Luigi Nerini; el director de la infraestructura, Enrico Perocchio, y el jefe de operaciones, Gabriele Tadini.
Los tres fueron detenidos y enviados a prisión la noche posterior al accidente, acusados de homicidio múltiple doloso, desastre por negligencia y eliminación de herramientas para evitar accidentes de trabajo. Nerini y Perocchio fueron liberados días después, mientras que Tadini fue puesto en arresto domiciliario, tras admitir que desactivó el sistema de frenado, lo que originó la caída.
Entre los nuevos acusados figuran el presidente del consejo de Administración de Leitner, Anton Seeber, y el consejero delegado Martin Leitner, además del empleado que realizó la pieza del cable de tracción superior de la cabina que se rompió durante el accidente.
También hay representantes de Rvs, Sateco y SCF Monterosa, empresas que han llevado a cabo intervenciones y verificaciones de la instalación anteriores a la fecha del suceso.
Las dos sociedades investigadas, Leitner y Ferrovie del Mottarone, están acusadas de violar las normas para la tutela y la seguridad en el trabajo.
La tragedia conmocionó a la opinión pública, que siguió con interés la evolución de Eitan, el niño de 5 años único superviviente y que permaneció varios días en la unidad de Cuidados Intensivos del hospital Regina Margherita de Turín (norte) debido a las lesiones.
Tras ser trasladado a planta y comenzar un programa psicológico ante el trauma vivido, el menor fue dado de alta el pasado 10 de junio, cuando regresó a Pavía junto a su tía, quien se ha ocupado de él tras la muerte de sus padres y su hermano.
EFE