Un ingeniero contratado para intentar descubrir la causa del derrumbe un edificio residencial en el sur de Florida el mes pasado advierte a funcionarios que es probable que el sitio todavía no sea seguro.
Por AP
El ingeniero estructural Allyn Kilsheimer dijo a funcionarios de Surfside y Miami-Dade en una carta el jueves que la avenida Collins podría ceder, reportaron los medios Miami Herald y WPLG.
Lo único que queda en pie del edificio Champlain son los muros del estacionamiento subterráneo alrededor de una cimentación ahuecada, y Kilsheimer indica que sin más apoyo para esos muros, el tránsito podría provocar su derrumbe y partes de la calle caerían al vacío.
“Si el muro ahí se derrumbara o rotara sustancialmente, el barro retenido bajo la calle y acera podría moverse con él”, escribió Kilsheimer, de Ingenieros Estructurales KCE.
Recomienda que se construya una berma para apuntalar los muros cerca de la calle y acera. De otra forma, el movimiento “podría causar que partes de la calle colapsen comprometan gravemente los servicios públicos bajo la calle”, escribió.
El condado Miami-Dade trae cuadrillas para ayudar a apuntalar los muros subterráneos restantes, dijo al periódico Herald Rachel Johnson, directora de comunicación del condado.
“Buscamos contratar a una empresa que haga el apuntalamiento y fortalecimiento de los muros para asegurar que no haya riesgos”, comentó.
El Instituto Nacional de Estándares y Tecnología, una agencia federal que investiga el derrumbe, ha estado monitoreando la seguridad del sitio.
La avenida Collins, que es la principal vialidad en la isla barrera, ha estado cerrada al tránsito cerca del sitio desde el 24 de junio, cuando el edificio se derrumbó parcialmente matando al menos a 97 personas. Funcionarios del pueblo indicaron que la avenida Collins podría reabrirse pronto.
En la carta, Kilsheimer indicó que fuertes lluvias podrían aumentar sustancialmente los riesgos.