Los pacientes renales en el estado Lara, llevaron a cabo una protesta frente a la sede de la Gobernación, para denunciar el abandono en que se encuentran por parte de las autoridades.
Entre las principales quejas de los más de mil pacientes renales de la entidad se encuentra la falta de medicamentos, ya que el alto costo de cada uno de ellos, sumado a los bajos salarios les impide comprarlos.
“Un trasplante en clínicas privadas está de 40 mil a 70 mil dólares, de igual manera estamos exigiendo el derecho a la gasolina. A los pacientes renales le dan 30 litros cada 20 días”, denunció un paciente desde la concentración.
Aseguran que además tienen problemas para conseguir los medicamentos y los que consiguen son muy costosos.
“No nos llegan todos los hipertensivos, protectores gástricos, vitaminas, otra serie de medicamentos, tenemos problemas para los catéter, los pacientes que pierden las cúpulas necesitan catéter y son muy costosos”, denunció otra paciente.
Nota de prensa