El Parque de los Príncipes solo tiene ojos para Leo Messi. El mismo día en que el jugador aterrizó en París para firmar con el PSG, el club tenía ya preparada su alfombra roja para recibir con honores al delantero, que ha congregado a cientos de aficionados en los alrededores del estadio.
La esperanza de ver de cerca al jugador ha ido al alza desde que el jueves anunciara su no continuación con el Barcelona y el domingo confirmara las negociaciones con el París Saint-Germain (PSG).
Tanto en el aeropuerto de Le Bourget, en las afueras de la capital francesa, como en el campo, las horas previas a la presentación formal del jugador, prevista para este miércoles, han atraído a numerosos aficionados, a los que Messi saludó a su salida del aeródromo.
Esa breve aparición del internacional argentino en la primera planta de la instalación aeroportuaria hizo inminente el inicio de la nueva etapa futbolística del jugador, de 34 años, cuyo desembarco ha provocado tanta ilusión como sorpresa.
“Todo el mundo pensaba que iba a acabar su carrera en el Barcelona. Su firma en el PSG es una muy, muy buena noticia para nosotros. Lo vamos a recibir como se merece”, cuenta a EFE Zalegh, hincha de 22 años que acudió al estadio.
Bengalas, cánticos con su nombre y aplausos espontáneos reflejaron en el Parque de los Príncipes las ganas que la afición le tiene a un jugador que esperan que ayude al equipo a hacerse con la Liga de Campeones.
“Con la llegada de Messi el PSG puede ganar títulos europeos y desarrollar su juego tal y como lo esperaba desde hace tantos años. Que venga es algo bueno para el fútbol francés y para el PSG”, señala Zouhair, que ha ido al estadio para intentar verle de cerca “porque es algo que ocurre una vez en la vida”.
El jugador fue del aeropuerto al reconocimiento médico en el hospital Americano de Neuilly (oeste de París), pero la hinchada no perdía la esperanza de que sus planes le hicieran pasar por la sede de su nuevo equipo, al que se incorporó el 8 de julio el español Sergio Ramos.
UN BROCHE DE ORO EN PARIS
“Ver que Messi va a venir al club de la capital es algo increíble. No me entra en la cabeza”, recalca Walid, madrileño de 19 años que lleva cinco viviendo en París y que dice respetar al delantero “porque, como madridista, nos ha hecho mucho, mucho daño. Siempre marcaba”.
Al campo también se acercó algún compatriota, como Tomás, de 28 años y recién instalado en la capital gala.
“La gente de Argentina estamos contentos y dolidos al mismo tiempo. Dolidos porque a Messi no se lo trató como se lo tenía que tratar. Le faltó en este último tiempo que lo abracen en Barcelona, que lo quieran y se lo demuestren. No tanto los hinchas, sino el club”, dice.
Messi, en su opinión, se suma al legado de grandes futbolistas argentinos, como también Di Stéfano y Maradona. “Acá en París se va a ganar a la gente y ya se la está ganando”, sostiene contento de que el inminente fichaje sea “el broche de oro” que el PSG necesita.
Su salida del Barcelona ha sido inesperada, según coinciden, pero también positiva.
“Ha escrito la historia con ese club, ha dejado su huella en el Barcelona. Es histórico. Me parece que era el momento de marcharse. El Barça es un gran club. Puede ganar títulos sin él”, recalca Zouhair.
Messi puede que vista la camiseta de su nuevo club ya este mismo miércoles. El PSG ha anunciado que habrá a las 09.00 GMT una conferencia de prensa. No ha detallado el motivo, pero el dispositivo de seguridad preparado a las afueras del estadio no necesita precisar a los fans el nombre del protagonista.
EFE.