Las víctimas de ambos casos son de nacionalidad venezolana y fueron asesinadas por sus parejas, la pasada semana, sin que hasta el momento se conozca el paradero de los supuestos femicidas, actualmente en fuga
Por Armando Hernández / lanacionweb.com
Las autoridades policiales, destacadas en zona de frontera con Colombia, se encuentran en estado de alerta para tratar de ubicar a dos hombres que aparecen como presuntos responsables de los asesinatos de dos mujeres, de nacionalidad venezolana, que se encuentran en fuga desde el mismo momento en que ocurrieron los crímenes, de los cuales conoce la policía de Cúcuta, por ser ese el lugar donde los femicidios fueron cometidos, uno de ellos en circunstancias que han causado gran consternación en ambos lados de la frontera, por tratarse de una sórdida historia que involucra a una mujer que a su vez era la pareja sentimental de su progenitor, quien terminó quitándole la vida.
De acuerdo con la versión que suministraron funcionarios policiales venezolanos, existe en ambos casos lo que se conoce como la extraterritoeridad del delito, debido a que los homicidios fueron cometidos en territorio colombiano, pero la brutalidad de tales hechos y las sospechas fundadas que los dos sujetos pudieran buscar refugio en el lado venezolano han hecho que los diversos organismos de seguridad, a manera de cooperación, se mantengan en alerta y estén desarrollando labores de inteligencia para tratar de ubicarlos, tanto en zonas de San Antonio del Táchira como de Ureña.
Incesto y femicidio
El primero de estos casos ocurrió el sábado 28 de agosto, en la trocha fronteriza conocida como “La Ramona”, que comunica a la zona de Llano Jorge, en San Antonio del Táchira, con el sector de Juan Frío, Colombia, donde en horas de la noche ocurrió el homicidio, con arma blanca, de Ruth María Lasso Ahumada, de 35 años de edad, con residencia en el barrio Unión Socialista. De acuerdo con la versión policial, presuntamente fue asesinada por su padre, David Lasso Zabala, de 56 años, de ocupación mototaxista, quien, además de ser el progenitor de la víctima, era también su expareja sentimental, con quien había procreado dos hijos, un varón de 18 años y una niña de siete.
A pesar del temor que la mujer sentía por el individuo, de quien dependía económicamente, acudió esa noche con la finalidad de entrevistarse con él, pues le iba a entregar un dinero. Entre ellos surgió una discusión y el sujeto terminó atacándola en presencia de varias personas, incluyendo el hijo de ambos, de 18 años de edad, y un adolescente, quienes intentaron impedir el crimen lanzándole piedras al individuo.
Este hecho de sangre ocurrió en el lado colombiano, y el supuesto femicida emprendió la huida hacia esa zona, en tanto que algunas personas intentaron, inútilmente, prestar auxilio a la muchacha, que resultó con heridas de arma blanca.
Explicó el informante que, a raíz de este caso y la consternación que causó en la zona de frontera, se ha establecido contacto con las autoridades policiales del Departamento Norte de Santander para buscar detalles sobre el sospechoso y, de acuerdo con las investigaciones que ellos manejan, no se descarta que Lasso Zabala se encuentre en territorio venezolano e incluso intente huir al interior del país, por cuando posee cédula de identidad venezolana.
Por otra parte, comentó que, ante los hechos ocurridos, una vez más queda demostrada la necesidad que toda aquella persona que sea víctima de abuso de género, o tenga conocimiento de ello, acuda de manera inmediata a la autoridad para realizar la respectiva notificación. Por los hechos, se conoce que Ruth María Lasso Ahumada fue presuntamente abusada por su padre desde que era una niña y que de ello surgió una relación incestuosa que fue tolerada. La mujer, al igual que su hermanita de 16 años, muerta en extrañas circunstancias, también resultó víctima de la violencia. Tanto ella como sus familiares, pese a que conocían el incesto y el comportamiento de violencia e inestabilidad del sujeto, permitieron tal situación y nunca presentaron denuncia. Inclusive ella acudió ante el Sistema de Protección del Niño, Niña y Adolescente, en el municipio Bolívar, en procura de ayuda para su pequeña hija de siete años, y hasta se le brindó ayuda psicológica, pero cuando se le planteaba la necesidad de acudir al Cicpc o Ministerio Público para hacer la denuncia, se negaba y hasta suspendió las visitas que con regularidad hacía al organismo municipal, dijo más adelante el funcionario.
“Este hecho, tan terrible como lamentable, nos debe llamar a la reflexión. Es una clara muestra que los hechos de violencia se agravan con el paso del tiempo y que bajo ningún concepto se deben tolerar, justificar o silenciar”, acotó luego.
En el caso del mototaxista Lasso Zabala, presunto asesino de su hija y a la vez expareja sentimental, la inteligencia policial está activada. Se les busca activamente a ambos lados de la frontera y es probable que muy pronto, con la cooperación de la ciudadanía, incluyendo a sus mismos familiares, a quienes por años mantuvo amedrentados mediante amenazas y su talante violento, se logre ubicar su escondite y darle captura.
Asesinato de modelo adolescente
El segundo caso, donde es asesinada una mujer venezolana, ocurrió en horas de la madrugada del miércoles primero de septiembre, en el octavo piso, apartamento No. 802, del edificio Barlovento,
en el conjunto residencial Prados del Este, cerca del denominado anillo vial de Cúcuta, donde las autoridades encontraron el cadáver de una joven de 17 años, identificada como E. G.
Monasterios Peña, quien según las averiguaciones se desempeñaba, junto a su pareja, como modelo de webcam y se dedicaban a producir videos de contenido sexual.
De las investigaciones se sabe que la muchacha fue víctima de maltrato y violencia, lo cual quedó evidenciado por los traumatismos que se detectaron en su rostro, producto de golpes. El cadáver estaba atado y amordazado. En el cuello tenía una blusa y un cable de electricidad, que supuestamente fue utilizado para estrangularla.
El trabajo preliminar desarrollado por funcionarios de la Policía Metropolitana de Cúcuta, primera autoridad en hacerse presente en el sitio, luego que fueran notificada sobre una situación anormal en la torre 1 de dicho completo residencial, fue averiguar lo que estaba ocurriendo. Determinaron que el presunto responsable del crimen sería la pareja sentimental de la muchacha, de nombre Félix Gabriel Villegas, un venezolano, nacido en Caracas, de 29 años de edad, quien llamó y notificó sobre el crimen a un amigo, compañero de apartamento, quien a su vez fue el encargado de dar aviso a la policía.
En este caso, las autoridades tienen evidencia fílmica sobre el comportamiento del sospechoso, a quien se le ve salir del edificio a eso de las cinco y 55 minutos de la mañana, llevando sobre sus hombros una bolsa negra, donde se presume estaban algunas de sus pertenencias. Los videos demuestran otra salida. La primera fue a las tres y 37 minutos de la madrugada, momento en que se le notaba inquieto y exaltado. La segunda, casi a las seis de la mañana, cuando ocurre la fuga.
Dice la policía que Villegas llamó a su amigo con el cual compartía apartamento, un rato después de haber dejado el lugar. Estaba llorando y le confesó que acababa de asesinar a la adolescente, y que su cadáver estaba en la vivienda. Así mismo, le rogó que lo perdonara por lo que había hecho. El amigo verificó y de inmediato dio aviso a la policía. Los funcionarios conversaron con vecinos para tratar de tener información clara sobre lo ocurrido la noche del martes y madrugada del miércoles, pero estos no pudieron ayudar. Dijeron que todo estaba aparentemente normal, no escucharon gritos, ni se percataron de alguna situación extraña. Algunos tenían conocimiento sobre problemas de violencia en la pareja, por constantes discusiones, y se presume que ellos discutieron la noche del martes y en la madrugada del miércoles ocurrió el crimen, por estrangulamiento.
El general Óscar Moreno, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, confirmó que la pareja es venezolana y se dedicaba a producir material de contenido sexual que comerciaban a través de estudios webcam.
En este caso, como el anterior, el presunto femicida se encuentra en fuga y es buscado activamente a ambos lados de la frontera. Explicó uno de los funcionarios que las autoridades colombianas han alertado sobre la posibilidad de que Villegas haya regresado a territorio venezolano y se le busca en zona de frontera. “Sabemos que este hombre tiene residencia en la zona de Caricuao, en Caracas, y hasta allá hemos extendido las investigaciones. En los puestos policiales y militares de la frontera con Colombia, particularmente en los puntos de control conocidos como alcabalas, se han distribuido fotografías de los solicitados, y se les está buscando de manera activa en ambos países”, se dijo finalmente.