Rusia descarta por ahora mantener conversaciones con el Gobierno interino de Afganistán más allá de los contactos que mantiene su embajada en Kabul, dijo hoy el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
“Se mantienen contactos en Kabul a través de nuestra embajada. Son contactos necesarios para la seguridad de nuestros diplomáticos y para otros asuntos técnicos”, señaló en su rueda de prensa telefónica.
“De momento no planeamos mantener otro tipo de conversaciones”, especificó Peskov.
El portavoz recalcó que Rusia, al igual que la gran mayoría de países, seguirá “muy de cerca” los pasos que dé el nuevo Gobierno talibán para poder definir su postura oficial al respecto.
Preguntado qué haría falta para que Rusia reconociera el Ejecutivo de los talibanes, Peskov no quiso entrar en detalles.
“Monitorearemos de cerca los acontecimientos”, dijo únicamente.
El relativamente desconocido mulá Hassan Akhund será el nuevo jefe del Gobierno interino de Afganistán, un líder que figura en la lista negra de Naciones Unidas, junto a una veintena de ministerios clave.
Se trata de un Gobierno en el que por ahora no hay mujeres y cuyos miembros pertenecen todos a la formación islamista, aunque prometieron que “este gabinete será más inclusivo” con futuros nombramientos.
EFE