Más de 200 millones de dólares se perdieron en generadoras de electricidad que hoy son chatarra en Margarita

Más de 200 millones de dólares se perdieron en generadoras de electricidad que hoy son chatarra en Margarita

 

Para tratar de controlar la emergencia eléctrica que se vivió desde finales de 2011 en Margarita, el Ministerio de Energía Eléctrica invirtió más de 200 millones de dólares en 96 unidades de generación que fueron instaladas en diferentes puntos de la Isla.





Por Hazel Guédez / La Patilla

De acuerdo con la información aportada por Eustacio Aguilera, presidente de la Comisión de Electricidad del Centro de Ingenieros de Nueva Esparta, las mismas tuvieron para la época, una capacidad total instalada de 169,72 megavatios.

Detalló que de las 96 unidades de generación distribuida, 13 se instalaron en la Planta Luisa Cáceres de Arismendi: cinco de ellas de 1,827 MW y ocho de 1,521 MW.

Igualmente fueron instaladas ocho en la subestación de Boca del Río, de 1,827 MW cada una, así como 16 de la misma capacidad en la subestación de Las Hernández, municipio Tubores.

 

 

Asimismo instalaron ocho unidades en la subestación de Los Millanes, municipio Marcano, como también 21 unidades de 1,827 MW cada una en la subestación Morropo, ubicada en el sector Vista Bella de Porlamar, municipio Mariño.

Para atender la emergencia eléctrica en el este de Margarita, también instalaron 21 unidades de 1,827 MW cada una en el y ocho de 1,521 MW en el estacionamiento del hotel Venetur y 22 en las instalaciones del Canódromo .

A decir del especialista del gremio de Ingenieros de la entidad, ya para noviembre de 2015 solo quedaban operativas 13 de esas unidades en las distintas subestaciones, generando solamente 14,8 megavatios, pero desde finales de 2016 ninguna unidad está operativa, por lo que la generación de todo ese improvisado sistema está en cero megavatios.

 

 

“Tal desastre se produjo porque esas unidades fueron diseñadas para trabajar como plantas de emergencia es decir, cubrir las horas pico de consumo” recalcó Aguilera.

Expuso que eso significaba tres o cuatro horas diarias aproximadamente de operatividad pero el déficit de generación por otras fuentes en la isla de Margarita era de tal magnitud en esa época del 2011-2012 y comienzos de 2013, que las unidades en cuestión fueron sometidas a un uso bajo régimen permanente de 24 horas al día,7 días a la semana y los 365 días del año.

Aguilera destacó que consecuencia sucedió lo que le habían advertido a las autoridades de la Corporación Eléctrica nacional (Corpoelec) y todas las unidades terminaron excediendo las horas de servicio establecidas por el fabricante de 9.000 horas/servicio, después de las cuales debían ser sometidas a mantenimiento mayor lo cual, por supuesto, no le realizaron.

Acotó que adicionalmente, en el respectivo contrato de suministro el Ministerio de Electricidad no incluyó ningún tipo de repuestos o consumibles.

“El resultado era obvio ya que al producirse fallas graves en motores, baterías, generadores, sistemas de enfriamiento y otros las unidades debieron salir de servicio y ahora están convertidas en chatarra y hasta han sido desvalijadas posiblemente para venderlas como chatarra”, expuso Aguilera.