El Manchester United no quiere que el fichaje de Cristiano Ronaldo se interprete como un movimiento económico para aprovechar el tirón que aún tiene la estrella portuguesa. Por eso, el club no quiere dar a conocer el impacto financiero que ha tenido Cristiano en la venta de ‘merchandising’, como camisetas, con su característico ‘7’.
Los ‘Diablos Rojos’ pretenden que el fichaje de Cristiano, por el que apenas tuvieron que pagar 15 millones de euros (más 8 en objetivos), se vea como un movimiento puramente deportivo, pese a que las cifras indican que su impacto económico en Mánchester ha sido demoledor.
La empresa de venta de camisetas ‘Fanatic’ confirmó que, tras el anuncio de la llegada de Cristiano al United, su camiseta se convirtió en la más vendida de la historia tras el fichaje de un jugador por un equipo, superando al de Leo Messi por el París Saint Germain, al de Tom Brady por los Tamba Bay Buccaneers y al de Lebron James por Los Angeles Lakers.
Pese a que Cristiano ilusiona mucho a los aficionados, como se pudo ver en su debut en Old Trafford, donde fue ovacionado desde el principio hasta el final, el United quiere que esa euforia sea comentada solo en el terreno de juego.
Los ‘Diablos Rojos’, uno de los clubes más valiosos del mundo, notaron como el resto del mundo la pandemia, con unos ingresos que cayeron un 18 % hasta el 30 de junio de 2020, lastrados sobre todo por la bajada en la inyección por derechos televisivos, que se devaluó un 42 %.
Además, el United tuvo que renunciar también a la Superliga debido a las protestas de sus aficionados y a la salida del resto de clubes ingleses, por lo que no podrán ser parte del pastel de 3.500 millones con los que el banco JP Morgan quería financiar la competición.
EFE.