¡Pulverizaron otra vez al bolívar! En 13 años el régimen chavista eliminó 14 ceros a la moneda nacional

¡Pulverizaron otra vez al bolívar! En 13 años el régimen chavista eliminó 14 ceros a la moneda nacional

 

Entró en vigencia la tercera reconversión monetaria en Venezuela implementada en menos de 15 años. Del Bolívar Fuerte de Hugo Chávez Frías en 2008, pasamos al Bolívar Soberano en 2018 y ahora en 2021 al Bolívar Digital de Nicolás Maduro, quien no ha podido frenar el brutal proceso hiperinflacionario que atraviesa el país desde el último bimestre de 2017.





Por: Corresponsalía La Patilla

La reconversión que entra en vigencia desde hoy 1° de octubre supone técnicamente la eliminación de 6 ceros al cono monetario, lo que implica en términos prácticos que los bienes y servicios que antes costaban un millón de bolívares (1.000.000), hoy cuestan 1 bolívar del nuevo cono.

El régimen ha pretendido disfrazar la debacle económica denominando a esta nueva moneda Bolívar Digital, según el decreto número 4.553 de fecha 6 de agosto de 2021 y publicado en la Gaceta oficial número 42185 de esa misma fecha. De acuerdo con el artículo 6 del decreto No. 3.332, el Banco Central de Venezuela queda encargado de la regulación de todos los aspectos que no hayan sido cubiertos por ese instrumento normativo.

El objetivo de cualquier reconversión monetaria en el mundo con una nueva expresión monetaria es mejorar sustantivamente el sistema de pagos generales de una economía que haya sido afectada por largos periodos inflacionarios que debilitaron el poder de compra de los billetes y monedas.

En Venezuela es la tercera vez que se procede a eliminar los ceros para lograr un cono monetario que facilite el sistema de cómputos y todo tipo de transacciones en el mercado, así como el asiento y manejo contable de los presupuestos públicos y privados.

Desde el año 2014, Venezuela atraviesa la mayor y más drástica recesión económica en 100 años. En este 2021 será la única economía en el mundo con hiperinflación. A este cuadro ya dramático se suma una tasa de desempleo que de acuerdo al Fondo Monetario Internacional (FMI) es de 58,3% en 2020, la más alta del planeta.

Y este año nada ha cambiado en materia laboral. Los niveles de desempleo en el país superan, incluso, los de naciones pobres como Sudán (21%) y Armenia (17,5%). Muchos venezolanos subsisten por los subempleos informales y los aportes económicos de familiares en el extranjero.
La encuesta sobre la situación de pobreza realizada por investigadores de la UCAB, ENCOVID, ubica la pobreza extrema para este año 2021 en 76%, lo que constituye una radiografía de la crisis humanitaria que padecen los venezolanos.

Habla la gente

En las principales calles, mercados y unidades de transporte público lo que está en boca de todos es la circulación de los nuevos billetes. Algunos zulianos califican la medida como una “payasada” y aseguran que los precios no bajarán. Solo habrá una sensación de que todo será más barato, pero saben que eso no será así en la realidad. Los ciudadanos claman por un plan económico que brinde soluciones a la inflación y recupere el poder adquisitivo.

Tony Fuentes es un marabino de 49 años de edad y dice que este anuncio del Bolívar Digital es burdo y no se resolverán los problemas económicos con quitarle seis ceros a la moneda. Asegura que no pasará nada y que los precios seguirán igual de altos, porque hasta podrían aumentar por el redondeo. Así mismo señala que la mayoría de las compras y pagos se hacen en dólares, y su equivalente en bolívares no bajará, sino que al contrario subirá.

“De verdad el gobierno cree que aquí hay puros ignorantes o chavistas. En mis años de vida, los últimos cinco han sido lo más trágicos. El hambre y la desidia están a flor de piel. Por amor a Dios esto es otro invento más del gobierno. Aquí lo que tienen que hacer es abrir empresas, producir y dar empleos a la gente. En este país lo que hay es hambre y necesidad”, dice Fuentes.

Luz Duarte administra una venta de víveres que cuenta con un sistema administrativo para las ventas. Tiene previsto cerrar el negocio desde el 1° de octubre hasta el 5 de octubre, pues no pudo adecuar el sistema a la nueva modalidad. El técnico encargado de esta labor no pudo efectuarlo a tiempo.

“Esta nueva modalidad es solo un desgaste y una guachafa del gobierno. Los precios no bajarán, acá todo está anclado al dólar y eso no baja de precio, sino que sube día a día. Es cierto que la gente se confunde, porque todo cuesta millones de bolívares, y lo que se ha hecho es que todo se expresa en diminutivo al cliente. Lo que cuesta 4.300.000, uno dice 4.300 bolívares para facilitar. Lo que sí es engorroso son los pagos por las cantidades que muchas veces no caben en los renglones de pagos electrónicos y se deben hacer en partes”, dijo la comerciante.

Elvis León tiene 62 años y asegura que desde muy joven trabaja. Dice que está viviendo la época donde peor se retribuye el trabajo con sueldos miserables, producto de una crisis económica aupada y promovida por lo que calificó como “un gobierno corrupto que cada segundo desangra las reservas del país”.

En pleno proceso de reconversión monetaria, el precio del dólar en el mercado negro (dólar paralelo) sufrió un incremento abismal y rompió la barrera de los 5.000.000 de bolívares, un día antes de entrar en vigencia la medida económica. El dólar aumentó casi un 1.000.000 de bolívares en cuestión de horas, lo que vislumbra que la reconversión no detendrá la acelerada devaluación del bolívar.

El monstruo hiperinflacionario

El economista Rodrigo Cabezas Morales, profesor e investigador de la Escuela de Economía de la Universidad del Zulia (LUZ) y exministro de Finanzas (2007), afirma que la reconversión en la actual coyuntura es inevitable dada la obstrucción del sistema de pago general por la cantidad de ceros que tiene el cono monetario.

Sin embargo, afirma que “decir que esto resuelve los graves desequilibrios macroeconómicos es una grave ignorancia o un nuevo ejercicio de demagogia”. Para el investigador, la tarea principal del país es vencer la hiperinflación. “Si la reconversión no se acompaña con un programa macroeconómico que busque deliberadamente detener la anomalía más grave que tenemos, como es la hiperinflación, esto quedará como un efecto cosmético de corta duración”.

Se mostró escéptico sobre los resultados de esta medida a favor de la estabilidad y el crecimiento económico. “La crisis es de tal profundidad y magnitud en todos los órdenes, que se requiere un gobierno nacional capaz de consensuar un programa económico, tener la confianza de los actores económicos y financieros, regresar a los mercados de deuda multilateral y financieros globales. Esto es imposible que lo haga este gobierno, porque no tienen idea de qué hacer y cómo hacerlo”.

Según la opinión de algunos economistas y académicos, el denominado Bolívar Digital está destinado a desintegrarse en un lapso de seis a doce meses. La causa es clara y evidente: no hay políticas económicas que en el ámbito monetario, cambiario y fiscal detengan la hiperinflación.