Desde hace más de tres años los residentes de la calle Naiguatá en la urbanización Andrés Eloy Blanco en Ciudad Bolívar están siendo afectados por un bote de agua que ha erosionado parte de la vía, convirtiéndose en una especie de jardín, trayendo posibles focos de enfermedades a las personas.
Por Corresponsalía La Patilla
Julio García es uno de los residentes del lugar, quien sentenció que esta situación empezó hace tres años cuando una tubería cedió producto del tiempo, dañando el asfaltado y cediendo parte de la vía.
“Nosotros cuando observamos la situación fuimos a Hidrobolívar para pedir la pronta solución, pero allí no fuimos tomados en cuenta, al contrario la denuncia la archivaron y tres años después estamos viendo como parte de la calle cedió, creciendo el monte y convirtiéndose el lugar en un foco de enfermedades debido al agua estancada”, subrayó García.
Resaltó García que los vecinos hace poco fueron a la empresa nuevamente para exigir la reparación, pero se encontraron con unas instalaciones casi en ruinas, prácticamente abandonadas, eso es lo que pasa cuando no hay una gerencia por parte de profesionales en la materia.
Por su parte, Cristina González manifestó que esta situación perjudica a una anciana que vive a pocos metros de donde está el daño, el cual afecta a la persona y puede acarrear que su casa presente algún daño en la estructura por la gran cantidad de agua que hay en el lugar; mientras que otros sectores no tienen una gota; aquí se bota y nadie hace nada.
“Estamos preocupados porque pareciera que este bote de agua va para el cuarto año y nadie hace nada, ni siquiera han venido para tomarse la foto y decir que después volverán; lo peor que el agua estancada es un peligro para la comunidad, ya que puede ser foco de enfermedades como dengue, paludismo, ya hay gente que presenta alergias por los malos olores de la misma”, exclamó González.