Un acosador fantasioso que agredió sexualmente a una mujer después de atraerla fingiendo ser un futbolista de la Premier League del Leicester City ha sido encarcelado.
Por: DailyMail
Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Daniel Storer, de 22 años, se embarcó en la campaña de terror de diez meses al crear cuentas falsas en las redes sociales para ponerse en contacto con la víctima de 18 años.
Curiosamente se hizo pasar por futbolista, policía, abogado, paramédico, veterinario, estudiante universitario, paciente de cáncer y algunas de las identidades que adoptó eran de personas reales.
Un tribunal escuchó que bombardeó a la adolescente con mensajes después de crear historias falsas diseñadas para alentar a la víctima a enviar imágenes sexuales de sí misma.
Cuando ella lo bloqueó, Storer se obsesionó cada vez más y usó más mensajes para atraerla a su casa, donde la agredió sexualmente.
La víctima, que no puede ser identificada por razones legales, logró hacerse con valentía de una grabación de audio del ataque y se comunicó con la policía en diciembre del año pasado.
Su modus operandi era usar la fotografía y el nombre de una persona genuina, pero con otros datos para crear una cuenta falsa en las redes sociales. Normalmente, estos acosadores tratan de convencer a las víctimas de que les entreguen dinero en efectivo.
Los detectives iniciaron una investigación y descubrieron que Storer estaba vinculado a las cuentas falsas.
Descubrieron que había inventado otras historias falsas sobre la compra de mascotas para la víctima con el fin de obtener dinero de ella para cuidar de los animales.
También mintió que jugaba regularmente para el Leicester City, que fue violado por un hombre que murió poco después y que había sido víctima de un secuestro.
Storer, de Uppingham, Leicester, se declaró culpable por agresión sexual y acoso en el Tribunal Real de Leicester.
Fue encarcelado durante cuatro años con un período de licencia extendido de tres años.
Storer también fue objeto de una orden indefinida de prevención de daños sexuales y se le emitió una orden de restricción que le prohibía comunicarse con la víctima.
El detective Ken Huddart, de la policía de Leicestershire, dijo: “Storer planeó las cuentas y los mensajes falsos durante un período de tiempo significativo y causaron mucha angustia a la víctima”.
A Storer no le preocupaba en absoluto el efecto que sus acciones tendrían en la mujer.