En la audiencia del diputado Juan Requesens que se llevó a cabo este 17 de noviembre las confesiones dejaron en claro la actuación de los esbirros del régimen chavista.
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En el tribunal estuvieron presente además del diputado, 16 acusados por el supuesto “magnicidio frustrado” desde las 6:30 de la tarde hasta las 8:30 de la noche.
Durante la audiencia, comparecieron tres testigos y un funcionario de la Dgcim el cual habló sobre una pesquisa que realizó en una cuenta de Facebook, sobre una compre-venta de explosivo, mientras los testigos hablaron de allanamientos practicados a raíz de las investigaciones del caso.
Posteriormente, uno de los imputados, pidió el derecho de palabra ante la Juez para denunciar que él y su esposa fueron torturados por el uniformado, presente en la sala, quien le arrancó las uñas de los pies.
Según el testimonio, el hecho habría ocurrido el 5 agosto del 2018 en las instalaciones de la Dgcim donde además, fue golpeado y expuesto a corriente eléctrica con la finalidad de obtener claves de sus redes sociales.
El acusado solicitó el estatus de esas investigaciones, sin embargo, no obtuvo mayores respuestas. Información que afirmó el abogado Joel García para nuestra redacción.