La Princesa Charlene de Mónaco «casi muere» en Sudáfrica después de someterse a múltiples cirugías y perder una cantidad preocupante de peso, según publica ‘Page Six’ citando fuentes próximas a la mujer de Alberto II de Mónaco. A los amigos de la Princesa les preocupa que la Familia Real monegasca haya subestimado la gravedad de su dolencia después de escuchar al Monarca afirmando en una entrevista que Charlene no solo tenía problemas físicos por lo que había ingresado en una clínica de rehabilitación a su regreso al Principado.
Por abc.es
«Es injusto que se la represente con algún tipo de problema mental o emocional», asegura la fuente de la citada publicación. «No sabemos por qué el Palacio le resta importancia al hecho de que ella casi muere en Sudáfrica».
La fuente señaló que la princesa Charlene, de 43 años, tenía una infección grave de oído, nariz y garganta, que originó «problemas graves de sinusitis y deglución derivados de una cirugía anterior». «No ha podido comer alimentos sólidos en más de seis meses debido a todas las cirugías por las que ha pasado desde entonces», señalan fuentes cercanas a la Princesa que añaden, «solo ha podido ingerir líquidos a través de una pajita, por lo que perdió casi la mitad de su peso corporal». «Definitivamente no tiene un problemas grave de salud mental, está agotada por los seis meses de cirugías y una incapacidad para comer adecuadamente como resultado».
El pasado 8 de noviembre la Princesa llegaba a Mónaco tras seis meses en su país natal. Visiblemente delgada y sin desprenderse de su mascarilla ni para la foto oficial, las consecuencias de las tres operaciones se hacían visibles. Días más tarde, el 16 de noviembre, el palacio de los Grimaldi emitía un comunicado en el que se anunciaba que Charlene debía continuar su recuperación en el Principado y que sus problemas de salud no la permitirían incorporarse a sus obligaciones oficiales: «La Princesa sufre fatiga general profunda y necesita un período de calma y descanso» y añadía «para proteger la comodidad y la privacidad esenciales para su recuperación, la ubicación de la Princesa seguirá siendo estrictamente confidencial».
Tras los rumores sobre la gravedad del estado de salud de la Princesa, Alberto II, afirmó en la revista ‘People’ que había sido admitida en un «centro de rehabilitación» en las afueras de Mónaco después de que se hiciera «evidente que no se encontraba bien». «Estaba claramente agotada, física y emocionalmente» y agregó «se encontraba abrumada y no podía afrontar los deberes oficiales, la vida en general o incluso la vida familiar».
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La falta de información sobre el verdadero estado de salud de la Princesa Charlene han provocado muchos rumores sobre la relación entre la pareja monegasca desde que Charlene abandonara el Principado en mayo para viajar a su país Sudáfrica en una misión contra la caza furtiva de rinocerontes. Seis meses en los que la mujer de Alberto de Mónaco estuvo separada de su marido y sus dos hijos, Jacques y Gabriella (6 años) por una infección grave en oídos, nariz y garganta por la que tuvo que ser operada en hasta tres ocasiones.