Liberan a la princesa Basmah bint Saud después de casi tres años de cautiverio en Arabia Saudí

Liberan a la princesa Basmah bint Saud después de casi tres años de cautiverio en Arabia Saudí

La princesa Basmah bitn Saud, en una imagen de archivo

 

Dos años y once meses. Es el tiempo que la princesa Basmah bint Saud ha permanecido encerrada en la prisión de máxima seguridad de Hair, a las afueras de Riad, por órdenes expresas de su primo, el Príncipe Heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman (MBS).

Por abc.es





Esta semana, por primera vez desde que comenzó su cautiverio, la princesa Basmah es una mujer libre, aunque por el momento no puede salir del país, según informa a ABC Henri Estramant, amigo de la princesa y muy cercano a su familia.

«Está libre desde el pasado jueves. De momento no hemos podido verla en persona, pero se la nota cansada», explican sus familiares, quienes asumen que la princesa «tardará mucho tiempo en recuperar el brillo en los ojos que tenía antes». Durante las próximas semanas, Basmah bint Saud permanecerá en Arabia Saudí, donde se puede mover con total libertad.

Desde que fue liberada hace dos días, permanece en su ático de Yeda, donde se recupera de un largo cautiverio que comenzó, precisamente, en esa misma casa el 28 de febrero de 2019, cuando en el interior de su domicilio la esperaban ocho hombres armados y vestidos con ropa occidental que, según la familia de la princesa, recibían órdenes de MBS. Los detalles del secuestro fueron publicados por este diario, que tuvo acceso a las cámaras de seguridad del ático de la princesa Basmah.

Se desconoce, de momento, cuáles han sido los motivos por los que MBS ha decidido liberar a su prima. Aquejada de una enfermedad cardiovascular desde hacía tiempo, Basmah se disponía a salir del país para recibir un tratamiento médico cuando fue secuestrada. Durante estos casi tres años de aislamiento no ha podido recibir el tratamiento que necesitaba.

La razón, sin embargo, por la que parecía que estaba retenida tenía que ver con la herencia de su padre Saud bin Abdulaziz unos 2 billones de euros, que ella intentaba recuperar- y por mostrarse publicamente en contra de las decisiones que MBS tomó antes de su cautiverio, como la guerra contra Yemen y el trato de las mujeres en Arabia Saudí.