La boda contó con más de 200 asistentes que tuvieron que hisoparse para poder ingresar. Una mujer que quedó afuera intentó reingresar al predio donde se realizó la celebración, pero no pudo
Por Infobae
“Para siempre. S&R”, escribió feliz Stefi Roitman en sus redes sociales y luego compartió un video de la gran fiesta que ella y su ahora marido, Ricky Montaner, realizaron en Exaltación de la Cruz para más de 200 invitados. En épocas de pandemia, que una celebración sea como en los viejos tiempos, requiere de extremar cuidados y protocolos, por eso los novios estuvieron atentos a todo, incluso aunque ello implicara dejar afuera a algunos asistentes o enojos.
En medio de la tercera ola de coronavirus y de un pico de contagios a nivel nacional, cada uno de los ingresantes a la celebración debió hisoparse para asegurarse no tener el virus, para así evitar su propagación, ya que en medio del baile en muchas ocasiones mantener la distancia social puede complicarse.
Así fue como, según pudo saber Teleshow, ya peinados, maquillados, vestidos y listos para entrar a la boda, seis invitados tuvieron que regresar al hotel tras dar positivo en el test de COVID-19.
Una de las invitadas a la boda, contó a este sitio cómo fue el proceso para entrar a la fiesta: “Entrábamos y desde el auto te hisopaban. En mi vida me hisoparon como en el casamiento. Yo venía del exterior y no les importó ese PCR que tenía. Después con el auto, con el auto esperabas y se acercaban a la ventanilla y te decían ‘positivo’ o ‘negativo’. Negativo, te quedabas y entrabas, positivo te tenías que ir. Cuando yo llegué, después de las 16.00, dos personas habían dado positivo, después fueron seis”.
“Era súper seguro”, destacó en todo momento la amiga de la novia, ya que nadie podía pasar al salón sin hisoparse ya que era condición inamovible sin importar parentesco ni si el invitado en cuestión tenía pase sanitario, PCR de hacía un par de horas o tres vacunas.
A pesar de que la medida fue indudablemente en pos de cuidar a todos los que allí estuvieron, desde novios e invitados hasta quienes trabajaron en el lugar, a algunas personas no les cayó tan bien y según contaron testigos, una señora en la puerta se enojó tras dar positivo e intentó volver a ingresar, pero no pudo.
Así, aunque el flamante matrimonio estuvo con seis invitados menos, cuya identidad y relación con ellos no fue revelada, le dieron al resto de sus acompañantes la garantía de que el lugar estaría libre de virus a pesar de la cantidad de gente, para de esa manera poder festejar de manera segura y sin consecuencias posteriores.
La relación entre Stefi y Ricky nació en octubre de 2019 a la distancia. Con la cuenta de Instagram de la banda que tiene con su hermano, él le envió un corazón, al que ella respondió con el emoji de las manos en forma de plegaria. Según dijo luego, lo hizo a modo de “agradecimiento”, además, no sabía cuál de los hijos de Ricardo Montaner era el autor de los mensajes. Hasta que recibió otro: “Ey, guapa, ¿cómo estás? Para que sepas, soy el soltero y el menos guapo de los dos hermanos Montaner” dando comienzo a una historia virtual. Hasta que el artista viajó a la Argentina e invitó a la actriz a un show y luego a comer. “Sin saberlo, ponía delante de mis ojos al amor de mi vida”, se sinceró Stefi alguna vez sobre aquel viernes de octubre en que se encontró cara a cara con el músico. En enero 2020, Stefi viajó a Miami a conocer a la familia Montaner. Y un día -más precisamente, el martes 14- salieron a dar un paseo en el auto y el cantante le hizo una romántica propuesta. Y le preguntó si quería ser su novia. Casi dos años después, los novios se convirtieron en marido y mujer.