Hannah Gutierrez-Reed, la armera de la película “Rust”, en cuyo set de filmación murió la directora de fotografía Halyna Hutchins tras recibir un disparo accidental por parte del actor Alec Baldwin, demandó este miércoles al proveedor de municiones del western, al que acusa de haber dejado balas reales en medio de cartuchos ficticios.
Por Clarín
El trágico episodio ocurrió el pasado 21 de octubre, cuando Baldwin, también coproductor de la cinta, utilizó un arma presentada como inofensiva durante la repetición de una escena y, además de haber ejecutado un disparo letal contra Hutchins, hirió al director Joel Souza. Conforme a las reglas de seguridad en el cine, las balas reales están totalmente prohibidas en los rodajes.
En su queja civil, interpuesta ante un tribunal, Reed reprocha al proveedor, Seth Kenney, haber entregado “municiones que fueron presentadas erróneamente como municiones ficticias”, inertes y sin pólvora, “cuando contenían a la vez municiones ficticias y reales”.
Según el documento, la policía descubrió después del incidente “siete balas” aparentemente reales repartidas en una caja de cartuchos, un carruaje, y cinturones de cartuchos que servían como accesorios a los actores.
Para la joven armera, la negligencia del proveedor “conllevó la introducción de balas reales en el set de grabación, que tuvo como resultado una catástrofe previsible”. No se conoce la compensación exigida en la demanda.
Kenney indicó a las autoridades que pudo potencialmente vender a la producción de la película municiones ensambladas artesanalmente – quizá a partir de elementos reciclados-, cuyo logotipo corresponde al que figuraba en el cartucho mortal. Pero luego excluyó la eventualidad en el canal ABC.
Hasta el momento nadie ha sido arrestado, pero la justicia no excluye entablar persecuciones penales.
Baldwin: “Yo no apreté el gatillo”
Baldwin aseguró que nunca apretó el gatillo de la pistola con la que mató de forma accidental a Hutchins durante el rodaje del filme “Rust”.
“El gatillo no fue apretado. Yo no apreté el gatillo. Nunca apuntaría con un arma a nadie y apretaría el gatillo, nunca”, dijo Baldwin en un reportaje para la cadena ABC, difundida en los primeros días de diciembre.
Además, en esa oportunidad, señaló: “Alguien puso munición real en esa pistola, una bala que ni siquiera debía estar en el edificio”.
En los últimos días, el actor realizó un furioso descargo en sus redes sociales ante una serie de versiones que sostenían que no colabora con la Justicia. “Cualquier insinuación de que no respondo preguntas o no acato órdenes, solicitudes o garantías con respecto a mi teléfono es una mierda, una mentira”, protestó el actor y productor.
La prensa estadounidense publicó que Baldwin estaba negando la entrega de su teléfono celular. “Podría haber evidencia incriminatoria en el teléfono, o podría ser por razones de privacidad”, dijo Kevin Kearon, exfiscal de distrito de Nassau y actual defensor penal, en una entrevista con The New York Post.
“Obviamente, cumpliremos con todas las solicitudes. Estamos absolutamente de acuerdo”, respondió el actor.