El papa Francisco expresó su cercanía y pidió oraciones por los damnificados tras la potente erupción del volcán submarino en Tonga, durante la audiencia general celebrada en el aula Pablo VI del Vaticano.
“Mi pensamiento va a las poblaciones de las islas de Tonga afectadas hace unos días por la erupción de un volcán submarino que ha causado graves daños materiales”, dijo Francisco al terminar la audiencia.
El pontífice expresó su cercanía espiritual a estas personas duramente afectadas e imploró “a Dios alivio para su sufrimiento”, además de invitar a los fieles a unirse en oración por estas personas.
Al menos tres personas han perdido la vida tras un “desastre sin precedentes”, como lo definieron las autoridades, el pasado sábado en Tonga, conformada por 169 islas y con 105.000 habitantes, cuando la violenta erupción de un volcán submarino provocó un tsunami con olas de 15 metros de altura.
Tonga permanecerá al menos cuatro semanas más incomunicada con el exterior después de que la erupción cortara el cable que provee al archipiélago polinesio de conexiones telefónicas e internet, informó este miércoles la Alta Comisión de Nueva Zelanda en Tonga. EFE