La Unión Europea (UE) confía en que es posible lograr un “buen acuerdo” para evitar que Irán se convierta en una potencia nuclear y consideró que sería un “error” no poder lograrlo “por cuestiones de calendario”, indicó este viernes un alto funcionario comunitario.
“Las cosas van en la dirección de tener pequeños acuerdos en diferentes cuestiones”, celebró, en referencia a las negociaciones que tienen lugar en Viena para intentar salvar el acuerdo nuclear iraní logrado en 2015.
Según señalaron las fuentes comunitarias, los negociadores reunidos en la capital austríaca van “por el buen camino para llegar a un acuerdo final”.
En cambio, reconocieron preocupación, “más que por la sustancia” del acuerdo, “por el calendario”, ya que “vamos muy despacio en esa dirección”.
En todo caso, consideraron que “sería muy trágico, un error increíble, que por cuestiones de calendario no pudiéramos llegar a un buen acuerdo, una buena solución”, y se inclinaron por que se podrá cerrar un acuerdo.
En Viena negocian Irán, Rusia, China, Alemania, Francia, el Reino Unido y Estados Unidos (de forma indirecta), con el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, como facilitador de las conversaciones, para mantener a flote el acuerdo de 2015 que limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones estadounidenses.
En 2018, el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, retiró a su país del pacto e impuso nuevas sanciones a Teherán, que respondió al año siguiente incumpliendo los límites impuestos a su programa atómico al acumular más uranio del acordado.
El objetivo de las negociaciones en curso es que EE.UU. regrese al pacto y que Irán vuelva a cumplirlo plenamente, para lo que pide el levantamiento de las sanciones.
El pasado viernes, Borrell se mostró optimista sobre la posibilidad de que las conversaciones en Viena lleguen a buen puerto “en semanas”, frente al pesimismo con el que concluyó 2021.
No obstante, este lunes el portavoz de Exteriores iraní, Said Jatibzade, metió prisa a Estados Unidos para que decida sobre un posible levantamiento de sanciones y advirtió de que a Washington no le gustará el “plan B” en caso de que fracasen las negociaciones.
EFE