Un hombre armado abrió fuego en la sala de espera de un hospital del Bronx el martes por la tarde en el último episodio impactante del crimen en la ciudad de Nueva York , disparando a otro hombre cuatro veces antes de huir.
Por Dailymail
El sospechoso no identificado estaba esperando a que lo vieran las enfermeras cuando “intercambió miradas” con otro hombre en la sala de espera del Hospital
El desgarrador video del tiroteo muestra al hombre armado de pie para mirar a la víctima y luego abrir fuego sin previo aviso, justo en frente del mostrador de recepción.
Luego huyó, dejando al pistolero incrédulo mientras la sangre brotaba de su brazo.
No está claro si fue un tiroteo al azar o si la pareja se conocía. Una niña pequeña estaba sentada al lado del hombre que fue golpeado; su madre la protegió durante todo el incidente.
El pistolero permanece armado y prófugo. La policía de Nueva York no ha ofrecido ningún tipo de descripción sobre él.
La víctima sobrevivió y fue atendida en el lugar por una herida de bala en el brazo. No está claro si alguien más resultó herido o si la pareja se conocía antes del incidente.
Es el último incidente preocupante en una ciudad cada vez más violenta donde cuatro policías fueron baleados en otros tantos días la semana pasada.
Después del tiroteo, NYC Health and Hospitals lo calificó como un “acto cobarde”.
El alcalde Eric Adams dijo que visitaría a la víctima en breve.
He sido informado sobre esto y visitaré a la víctima en breve.
“Este fue un acto reprensible, que empeoró aún más por el hecho de que sucedió en un lugar donde los neoyorquinos van por seguridad y para curarse”.
El lunes, un día antes del tiroteo en el hospital, Adams prometió tomar medidas enérgicas contra la violencia armada y afirmó que protegería a los neoyorquinos del “mar de violencia” que actualmente azota la ciudad.
“No dejaré que eso suceda”, prometió.
Sindicatos de policías y vecinos dicen que ya es demasiado tarde. Sin embargo, están abrazando a Adams, quien ha prometido ser más duro que su predecesor.
La cantidad de tiroteos en la ciudad de Nueva York se ha disparado en los últimos dos años, gracias a una serie de cambios devastadores en la reforma de las fianzas y los presupuestos.
El exalcalde Bill de Blasio, indulgente con el crimen, alentó las reformas y el nuevo fiscal de distrito, Alvin Bragg, ha anunciado planes para ser aún más indulgente con los delincuentes.
En su Nueva York, los delitos como el robo a mano armada serán degradados a hurto menor.
También prometió acabar con la fianza en efectivo siempre que sea posible, siguiendo los pasos de San Francisco devastado por el crimen.
Ayer, Pat Lynch, directora de la Asociación Benéfica de la Policía de la Ciudad de Nueva York, el sindicato policial más grande, dijo que aceptaría tener un ‘aliado’ en el Ayuntamiento de Adams.
‘Durante años, hemos pedido soluciones reales a nuestra crisis de delitos violentos. El alcalde Adams reconoció el problema y describió los inicios de un plan.
‘El mensaje en las calles es que no hay consecuencias por portar y usar armas ilegales… tiene que cambiar de inmediato porque ya hemos perdido más de lo que podemos soportar’.
El tiroteo del martes en el Bronx ocurrió pocas horas después de que un cuarto policía muriera por heridas de bala infligidas en el cumplimiento del deber.
El oficial de policía de Nueva York, Wilbert Mora, murió el martes por la mañana, cuatro días después de una emboscada en la que su compañero, el policía novato Jason Rivera, fue asesinado a tiros.
Rivera y Mora son los primeros policías muertos a tiros en el trabajo desde 2017.