El papa Francisco instó este martes a las monjas a “luchar” cuando “son injustamente tratadas, incluso dentro de la Iglesia”, tras reconocer que algunas son “reducidas a servidumbre” por responsables religiosos.
“Las invito a luchar cuando son tratadas injustamente, incluso dentro de la Iglesia, cuando su servicio, tan noble, se reduce a servidumbre, aún por parte de hombres de la Iglesia”, aseguró el pontífice argentino en un video divulgado el martes por el Vaticano.
En el video, dedicado a las oraciones del mes, el papa agradece la misión y la valentía de las mujeres religiosas y consagradas, al tiempo que pide rezar por ellas “para que sigan encontrando nuevas respuestas frente a los desafíos del tiempo actual”.
En varias ocasiones Francisco ha denunciado la “esclavitud” y “la violencia” que sufren las mujeres dentro de la Iglesia y criticado la tendencia de algunos jerarcas, entre ellos cardenales y miembros de la Curia Romana, de emplearlas para el servicio doméstico.
“Son mujeres que trabajan como sirvientas” de sacerdotes, obispos o cardenales, empleadas para “cocinar, limpiar, lavar la ropa”, y que además “están mal pagadas”, lamentó con la AFP Lucetta Scaraffia, historiadora, columnista y ex directora de la revista “Donne Chiesa Mundo” (Mujeres Iglesia Mundo).
En 2018, el suplemento del L’Osservatore Romano, periódico oficial del Vaticano, causó sensación al abordar sin tabú la explotación de las monjas.
“Es considerado normal en la Iglesia: las mujeres deben servir sin pedir nada a cambio”, subrayó Scaraffia, autora del libro “Feminista y cristiana”.
Según las estadísticas publicadas por la agencia católica Fides, en el 2021 había 630.000 mujeres religiosas en todo el mundo.
AFP