Unas 30.000 personas salieron en una semana de la ciudad ucraniana de Mariúpol, sitiada por las fuerzas rusas, aseguraron las autoridades locales, quienes explicaron que aún desconocen el balance del bombardeo del miércoles contra un teatro donde se habían refugiado civiles.
Según un mensaje de la alcaldía publicado en Telegram, “alrededor de 30.000 personas se fueron en su propio medio de transporte” y “el 80% de las viviendas de la ciudad fue destruido”. El Ayuntamiento agregó que estaba “averiguando informaciones sobre las víctimas” del bombardeo contra el teatro.
AFP