¿Has oído hablar alguna vez de personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte? Un equipo multidisciplinar internacional, liderado por el doctor Sam Parnia de la unidad de Cuidados Críticos y Reanimación de la Facultad de Medicina Grossman, ha publicado un nuevo consenso sobre qué son realmente las ECM (Experiencias Cercanas a la Muerte).
Por: 20 Minutos
Este estudio trata de analizar todas las pruebas científicas sobre las ECM acumuladas hasta ahora y representa la primera declaración de consenso revisada.
Durante décadas, las personas que han experimentado esta sensación relatan haber vivido episodios lúcidos imposibles de explicar que implicaban una mayor conciencia y conocimiento. Pero, ¿qué son y qué se sabe tras este consenso?
¿En qué consisten?
Según varias investigaciones anteriores, las ECM no se corresponden con alucinaciones, ilusiones o experiencias inducidas por drogas psicodélicas, pero sí siguen un “arco narrativo específico” que implica una sensación de “separación del cuerpo con un elevado y vasto sentido de la conciencia y el reconocimiento de la muerte, el viaje a un destino”, recogen en Infosalus.
De acuerdo con esta investigación, la experiencia de la muerte culmina en subtemas separados no identificados previamente y se asocia con “una transformación y crecimiento psicológico positivo a largo plazo”.
“La parada cardíaca no es un infarto, sino que representa la fase final de una enfermedad o acontecimiento que provoca la muerte de una persona. La llegada de la reanimación cardiopulmonar (RCP) nos demostró que la muerte no es un estado absoluto, sino que es un proceso que puede revertirse en algunas personas, incluso después de haberse iniciado”, detalla el autor principal del estudio, Sam Parnia.
Analizar los acontecimientos mentales
En este sentido, lo que ha permitido este estudio científico de la muerte es que las células cerebrales no se dañan de forma irreversible a los pocos minutos de la privación de oxígeno cuando el corazón se detiene. “En cambio, ‘mueren’ a lo largo de horas. Esto está permitiendo a los científicos estudiar objetivamente los acontecimientos fisiológicos y mentales que se producen en relación con la muerte”, apunta el experto.
Según los investigadores, la evidencia hasta ahora sugiere que ni los procesos fisiológicos ni los cognitivos terminan con la muerte, y no ha sido posible descartar las afirmaciones de conciencia de los pacientes que han experimentado este tipo de experiencias.