Human Rights Watch (HRW) y más de 130 organizaciones no gubernamentales (ONG) pidieron este lunes al Gobierno de Brasil que accione la visita al país del nuevo mecanismo de las Naciones Unidas sobre justicia e igualdad racial en la seguridad pública.
En una carta dirigida al ministro de Relaciones Exteriores, Carlos França, HRW y las 134 ONG piden al canciller “solicitar de manera formal” la visita a Brasil de una misión del Mecanismo Internacional de Especialistas Independientes para Avanzar en Dirección a la Justicia e Igualdad Racial.
El pedido de la sociedad civil es para que la visita sea realizada antes de la 51ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), prevista para el segundo semestre de este año.
El reciente mecanismo fue establecido con el propósito de promover la justicia y la igualdad racial en la aplicación de la ley y, así, “contribuir para responsabilizar a los autores en los casos de abusos y reparar a las víctimas”, citó la carta.
“Brasil podría desempeñar un papel importante al colaborar con los esfuerzos del mecanismo para examinar el impacto del racismo estructural en la aplicación de la ley en todo el país”, añadió.
De acuerdo con la misiva, “la violencia policial es un problema crónico de derechos humanos en Brasil, impactando desproporcionadamente a la población negra, que tiene casi tres veces más posibilidades de ser muerta por la Policía que la población blanca”.
En 2020, según la carta, murieron en acciones de la Policía más de 6.400 personas, el mayor número registrado por el Foro Brasileño de Seguridad Pública, una organización sin ánimo de lucro que compila datos de fuentes oficiales regionales.
La población negra representa en Brasil el 56 % y responde por casi el 80 % de las personas muertas en acciones de la Policía, una proporción que se dispara al 97 % en estados como Bahía y Pernambuco, ambos en la región Nordeste, según la Red de Observatorios de la Seguridad.
Para HRW y las ONG que firman la carta, el nuevo mecanismo de la ONU puede “ofrecer recomendaciones relevantes para enfrentar ese problema crónico”.
“Esas recomendaciones podrían incentivar reformas en las fuerzas policiales que aumenten la transparencia, la rendición de cuentas y la eficacia en su misión de proteger a todos los brasileños, sin cualquier discriminación”, completó.
La invitación al mecanismo, indicó la carta, sería una “medida positiva” para demostrar la “disposición del Gobierno” en trabajar con los órganos de combate al racismo y la discriminación racial desde el contexto de la “aplicación de la ley”.
La visita tendría por objetivo recolectar informaciones, reuniones con representantes del poder Ejecutivo y del sistema judicial, con la Policía, sociedad civil y comunidades directamente afectadas, concluyó la misiva que espera ahora la respuesta del Gobierno de Jair Bolsonaro.
EFE