EEUU y aliados intensificarán ayuda militar a Ucrania

EEUU y aliados intensificarán ayuda militar a Ucrania

Militares ucranianos viajan en tanques hacia la línea del frente con las fuerzas rusas en la región de Lugansk de Ucrania el 25 de febrero de 2022. – Las fuerzas ucranianas combatieron a las tropas rusas en la capital, Kiev, en el segundo día de un conflicto que se ha cobrado decenas de vidas, como la UE aprobó sanciones contra el presidente Vladimir Putin. Se escucharon disparos de armas pequeñas y explosiones en el distrito de Obolonsky, en el norte de la ciudad, cuando lo que parecía ser un grupo de avanzada de la fuerza invasora rusa dejó un rastro de destrucción. (Foto de Anatolii STEPANOV / AFP)

 

 

Estados Unidos y sus aliados evaluarán mensualmente las necesidades defensivas de Ucrania en la guerra contra Rusia, que prosigue su ofensiva aunque sin descartar una solución “diplomática”, según dijo el martes el presidente Vladimir Putin.

“La reunión de hoy se convertirá en Grupo de contacto mensual sobre Ucrania”, dijo el secretario estadounidense de Defensa, Lloyd Austin, tras un encuentro con sus homólogos aliados de unos 40 países en la base estadounidense de Ramstein, en Alemania.

Austin insistió en que “las semanas que vienen serán cruciales” para Ucrania y aseguró que el gobierno del presidente Joe Biden está dispuesto a “remover cielo y tierra” para que Ucrania gane la guerra.

La ofensiva rusa se inició el 24 de febrero. Las fuerzas ucranianas lograron repeler el avance sobre la capital, Kiev, pero las tropas rusas avanzan lentamente en el sur y en la región de Donbás (este), parcialmente controlada por los separatistas prorrusos desde 2014.

Las fuerzas armadas rusas bombardean además puentes y vías férreas para ralentizar el suministro de armas occidentales, afirmó un asesor del Ministerio ucraniano del Interior, tras la destrucción de un puente vial y ferroviario sobre el estuario del Dniéster, en la frontera con Rumania.

– Putin abierto a “negociaciones” –

Las negociaciones sufrieron constantes interrupciones, pero Putin dijo este martes al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, que Rusia aún tiene “esperanzas en la capacidad de alcanzar acuerdos por la vía diplomática”.

En las discusiones de marzo en Estambul, Ucrania propuso un acuerdo por el cual un grupo de países garantizaría su seguridad; a cambio, Kiev renunciaría ingresar en la OTAN y dejaría de lado por un tiempo sus reivindicaciones territoriales sobre Crimea (anexada por Rusia en 2014) y las regiones separatistas prorrusas del Donbás.

Las intenciones de Putin son cuestionadas por los aliados de Ucrania.

“No hemos visto ninguna señal de que el presidente Putin sea serio acerca de las negociaciones”, dijo el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado.

“Nuestro propósito es asegurarnos de que (Ucrania) tenga en sus manos la capacidad de repeler la agresión rusa y, de hecho, fortalecer su posición en una eventual mesa de negociaciones”, agregó.

Estados Unidos, Reino Unido, Francia y República Checa se negaron inicialmente a suministrar armas ofensivas a Kiev, pero cambiaron su postura.

Alemania, cuestionada por sus reticencias, también prevé enviar tanques de tipo “Gepard”, especializados en la defensa antiaérea.

En Kiev, las grúas empezaron a demoler un monumento de la era soviética que ensalza la amistad entre Rusia y Ucrania.

– Guterres aboga por corredores humanitarios –

Guterres urgió, durante su visita a Moscú, la primera desde el inicio del conflicto, a crear “corredores humanitarios” para evacuar a la población civil de las zonas de conflicto en Ucrania.

Lavrov aseguró que Rusia está “dispuesta a cooperar (…) para aliviar el sufrimiento de la población civil”.

Guterres insistió en particular en la necesidad de una amplia movilización “para ayudar a salvar vidas en Mariúpol”, la ciudad portuaria del sureste devastada por los bombardeos desde inicios de marzo.

Las fuerzas rusas siguen machacando el gran complejo metalúrgico Azovstal, donde se atrincheraron los últimos resistentes, dijo en Facebook el gobernador de la región.

Según Kiev, unos 100.000 civiles se hallan atrapados en Mariúpol.

El conflicto ha forzado ya a casi 13 millones de ucranianos a dejar sus hogares, de los cuales más de cinco millones se fueron del país, según las últimas cifras de la ONU.

La organización calculó este martes que el número de refugiados ucranianos que huyen del país podría alcanzar los 8,3 millones y duplicó a 2.250 millones de dólares su pedido de ayuda humanitaria de emergencia para Ucrania.

– Situación complicada en el Donbás-

En el frente del Donbás la situación es “complicada” para la “moral” de las tropas ucranianas, dijo a la AFP Irina Ribakova, oficial de prensa de la 93ª brigada ucraniana.

Varias localidades, como Izium y Kreminna, cayeron en las dos últimas semanas y el ejército ruso sigue ganando terreno.

Tanto en el Donbás como en el sur, “el enemigo efectúa bombardeos contra posiciones de nuestras tropas a lo largo de toda la línea del frente con morteros, artillería y lanza-cohetes múltiples”, indicó el Ministerio de Defensa ucraniano.

En el sur, dos misiles rusos impactaron el martes por la mañana en la ciudad de Zaporiyia, causando al menos un muerto y un herido, informó la administración regional.

La ciudad -donde se refugiaron muchos civiles que huyeron de Mariúpol y de localidades del Donbás- se prepara ahora para un ataque de las fuerzas rusas desde la costa, según el Ministerio ucraniano de Defensa.

– Preocupación en Moldavia –

La amenaza de que el conflicto se extienda a otros países persiste, sobre todo a Moldavia, en la frontera sur de Ucrania.

La presidenta de este país, Maia Sandu, denunció un “intento de hacer que las tensiones aumenten” y llamó a la población a “mantener la calma”, tras varias explosiones en la región separatista prorrusa de Transnistria.

Estados Unidos advirtió igualmente sobre tentativas de provocar una “escalada de tensiones” en esa región.

La guerra, y las sanciones occidentales contra Rusia, han puesto al mundo ante fuertes presiones económicas.

Rusia, por su parte, exige que se le pague en rublos, y ya no en dólares o en euros, sus suministros de hidrocarburos.

Polonia y Bulgaria informaron que a partir del miércoles dejarán de recibir gas ruso, por decisión del gigante energético de ese país, Gazprom. AFP

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