Las malas noticias llegan de todas partes para los mercados mundiales, golpeados por la guerra ruso-ucraniana, mientras el euro cae a sus menores niveles en cinco años y las bolsas se mantienen el miércoles en precario equilibrio.
Las plazas bursátiles europeas operaban cerca del equilibrio desde su apertura, sin una tendencia clara, tras haber registrado pérdidas al cierre de la jornada anterior del martes.
El anuncio del grupo ruso Gazprom de suspender todas sus entregas de gas a Polonia y Bulgaria, al asegurar que estos dos países miembros de la Unión europea no efectuaron sus pagos en rublos, impulsó al euro a su más baja cotización desde abril de 2017 (-0,22% a 1,0613 dólar).
Asimismo, explosiones en la región separatista moldava prorrusa de Transnistria hacen temer una propagación de la guerra más allá de las fronteras de Ucrania.
En este contexto, la cotización europea de referencia del gas natural subía 10% desde la apertura, y más de 21% al cabo de dos días, a 113 euros el megavatio/hora.
Los precios del petróleo también repartían al alza, atizando los temores de perturbaciones en el suministro de hidrocarburos rusos.
Hacia las 11H35 GMT, el barril de Brent de Mar del Norte para entrega en junio subía 0,58%, a 105,60 dólares.
El barril de West Texas Intermediate (WTI) estadounidense, para entrega en el mismo mes, ganaba 0,54% y se situaba en 102,25 dólares.
En Asia, la bolsa de Tokio perdió este miércoles 1,17%, pero las plazas chinas estuvieron sostenidas por el llamado del presidente Xi Jinping a realizar “masivos esfuerzos para reforzar las infraestructuras del país”, que sufre una ralentización económica por sus estrictas medidas anti-Covid. Shanghai ganó 2,49%, después de caer en las tres sesiones anteriores, y Hong Kong terminó estable (-0,05%).
El martes, la bolsa de Nueva York había caído con fuerza, con inversores ansiosos por previsiones prudentes de empresas estadounidenses, que abonan la tesis de una desaceleración económica.
AFP