La delegación conformada por un total de 10 deportistas del estado Apure con edades comprendidas entre 5 a 7 años, cinco técnicos y cinco representantes de los competidores, se encuentran a la espera del apoyo financiero por parte del gobierno regional, para garantizar la participación de los criollos en el II Encuentro Nacional Comunitario de Fútbol Sala, pautado en Maracay, estado Aragua, a partir del 2 hasta el 6 de junio de este año, donde los apureños esperan representar dignamente al estado.
María Eugenia Díaz // Corresponsalía lapatilla.com
Sin embargo, la asistente técnica de la Escuela Barak Fútbol Club, Rosa Morales, denuncia este jueves 12 de mayo, que la asistencia de los pequeños en esta competencia nacional está amenazada, a pesar que la directiva de su club acudió a la sede de la Gobernación del estado Apure, así como a la Fundación del Niño y la Fundación del Deporte (FUNDEAPURE), de la entidad llanera, para solicitar ante estas instituciones ayuda para el pago del transporte, alojamiento y logística, sin haber obtenido respuesta de ningún tipo, por parte de estas instituciones gubernamentales.
“FundeApure nos tiene como la pelota de Alfredo Tenepe, para allá y para acá. No nos dieron ninguna respuesta. Nos mandaron a hablar con el presidente de la Asociación de Fútbol quien tampoco nos dio esperanzas y este a su vez nos pidió pedir el apoyo a FundeApure. Estamos a 18 días de los Juegos Nacionales y no tenemos ayuda de ninguna institución, gobernación, ni de entes privados ni públicos, y estos niños están emocionados y motivados a ir a estos Juegos Nacionales, he hecho todo para hacerlo posible. Pero no he logrado el objetivo”, dijo la directora técnica para La Patilla.
Morales, presenta constancia de las peticiones hechas en los entes del Estado, en aras de poder garantizar la participación de estos deportistas en esta competencia nacional. Revela que no pueden costear el transporte de ida-vuelta del equipo completo, cotizado en 400 dólares, el alojamiento de cuatro días en 180 dólares y 220 dólares para la alimentación.
Ante tal situación, el personal técnico pide ayuda a las instituciones y empresas privadas para poder cristalizar el sueño de estos niños, quienes aspiran competir con otros estados y por qué no, obtener la victoria.