El joven de 18 años que ayer mató a diez personas e hirió a otras tres, en su mayoría afroamericanas, en un supermercado de la ciudad neoyorquina de Buffalo escribió cuando estaba en la escuela que quería perpetrar un tiroteo masivo, según el diario The Wall Street Journal (WSJ).
El periódico, que cita a un agente con conocimiento de la investigación, asegura que los profesores informaron a la Policía.
El comisionado de Policía de Búfalo, Joseph Gramaglia, reconoció durante una rueda de prensa celebrada este domingo que en junio del año pasado el atacante, identificado como Payton Gendron, hizo una “amenaza generalizada, pero no una amenaza específica dirigida hacia un lugar o una persona en concreto”.
Gramaglia, que no ofreció más detalles sobre esa amenaza, se limitó a apuntar que la Policía investigó lo ocurrido, mantuvo una entrevista con él y lo trasladó a una institución mental para que fuera evaluado.
Según el WSJ, un día y medio después fue dado de alta.
“Hicieron su trabajo al máximo nivel que se pudo hacer en ese momento”, subrayó Gramaglia, que no aceptó más preguntas.
El sábado, Gendron se trasladó en coche desde Conklin, una localidad a 320 kilómetros al sureste de Búfalo, y lo aparcó en el estacionamiento del supermercado Tops hacia las 14.30 hora local (18.30 GMT).
Después salió armado del vehículo, ataviado con un chaleco antibalas, un casco y una cámara con la que retransmitió en vivo la masacre a través de la plataforma Twitch, perteneciente a Amazon, antes de entregarse a la policía.
Las autoridades están investigando lo sucedido como un ataque terrorista y un crimen de odio en base, entre otras cosas, a un manifiesto que al parecer el joven dejó escrito.
Una investigación preliminar descubrió que Gendron había visitado repetidamente webs que propugnaban ideologías de supremacía blanca y teorías de conspiración basadas en la raza y que había investigado extensamente los tiroteos de la mezquita de 2019 en Christchurch (Nueva Zelanda), la masacre de Utoya en Noruega en 2011 y la matanza cometida por el supremacista Luca Traini, que en 2018 disparó a inmigrantes desde un coche en Italia.
Las capturas de pantalla que supuestamente pertenecen a la transmisión de Twitch parecen mostrar un epíteto racial garabateado en el rifle utilizado en el ataque, así como el número 14, una probable referencia a un lema de la supremacía blanca.
El obispo baptista Darius Pridgen aseguró durante una misa en honor de las víctimas que en el texto Gendron, de raza blanca, dejó escrito que quería matar a todos los negros.
Por su parte, la gobernadora Kathy Hochul, aseguró que el atacante también redactó que había elegido asesinar en ese barrio, porque era de mayoría negra.
“No fue un acto de violencia al azar. Hemos visto suficiente de esto. Vemos lo que sucede cuando hay demasiadas armas en nuestras calles y la gente se enoja o está en medio de una batalla entre pandillas y hay víctimas inocentes”, dijo hoy Hochul.
Con información de AP y EFE