La Fiscalía General del Estado de Ecuador ha abierto una investigación para determinar las circunstancias de la muerte este viernes de tres individuos que supuestamente manipulaban explosivos y drones cerca de una cárcel de Guayaquil, ciudad de la costa sur del país.
En un mensaje en redes, el órgano fiscal informó del inicio de la investigación “por la muerte de tres personas que -aparentemente- manipulaban explosivos e intentaban ingresarlos a la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, utilizando drones”.
La Fiscalía aclaró que el suceso se produjo de madrugada, en un cerro de una urbanización privada en la localidad de Daule, a un kilómetro del centro penitenciario, el más poblado del país, situado en la provincia de Guayas, una de las tres que desde abril se encuentra bajo estado excepción por la violencia callejera del crimen organizado.
Personal de la Fiscalía y agentes de la Policía Nacional recolectaron los primeros indicios del suceso.
El mayor Henry Meneses, jefe de operaciones del distrito de Daule, precisó que miembros de la unidad antiexplosivos (GIR) de la Policía se desplazaron al lugar y a primera hora del día llevaban a cabo labores de control de “aparatos aparentemente explosivos” que en apariencia eran “similares a unos drones”.
Meneses indicó que se encontraron en el lugar tres cuerpos, algunos de los cuales tenían extremidades desmembradas, presumiblemente por la manipulación de los aparatos no tripulados.
El responsable policial dijo que en las primeras pesquisas se localizó un “móvil con baterías para drones, el mismo vehículo que se encontró a pocos metros”.
Por su parte, el coronel de la Policía Julio Miño indicó a los medios desplazados al lugar del suceso que uno de los individuos fallecidos fue identificado y tenía antecedentes penales, mientras que aún se investigan las identidades de los otros dos muertos.
“Se identifican cuatro drones de características agrícolas, es decir, de capacidad alta para transportar carga de un tamaño bastante grande”, aseguró Miño antes de avanzar que una de las líneas de investigación es que los fallecidos hubieran acudido de madrugada a ese lugar descampado para manipular explosivos.
En septiembre pasado, una prisión de la provincia costera de Guayas, en Ecuador, fue atacada con drones desde el exterior, que provocaron tres explosiones y afectaron al techo del centro.
Este tipo de acciones se enmarcan en la crisis carcelaria que atraviesa el país y que en los dos últimos años se ha cobrado más de 400 presos muertos en enfrentamientos que las autoridades atribuyen los enfrentamientos entre bandas vinculadas al crimen organizado que se disputan el control interno de las cárceles.
EFE.