Créditos: Especial
Salvador Ramos es el adolescente de 18 años y autor del tiroteo de este martes en la escuela Robb Elementary School en Uvalde, Texas donde asesinó a 19 niños y a una profesora identificada como Eva Mireles.
Por: El Heraldo
Ramos no tiene antecedentes penales, apenas había cumplido los 18 años, sin embargo, si tuvo récord criminal de adolescente, pudo haber sido borrado o no estar disponible en primera instancia.
“Se cree que la policía lo abatió”, agregó el gobernador Greg Abbott, firme defensor de la posesión de armas de fuego. Asimismo, añadió que dos policías fueron heridos de bala y se espera que sobrevivan.
El mortal rifle de asalto
Salvador Ramos recientemente había adquirido dos rifles de asalto en su último cumpleaños, y fue a través de su cuenta de Instagram, donde compartió mensajes sospechosos unas horas antes del ataque.
Una usuaria compartió la conversación que sostuvo con Ramos este martes por la mañana, en donde el tirador le adelantó que quería decirle un secreto, por lo que le escribiría dentro de una hora y que tendría que responder: “Estaré tomando una siesta porque estoy muy enferma, pero si estoy despierta lo haré” dijo la chica que compartió los mensajes y el último mensaje que recibió de Salvador fue “voy a salir por aire.”
Tres días antes, la misma cuenta de Instagram compartió fotografías de dos rifles, incluido el que parecía ser un Daniel Defense AR-15 con un cargador de alta capacidad.
Un contacto de Instagram de Ramos compartió con medios de comunicación el recibo de un arma que compró en la tienda en línea de Daniel Defense, en donde se envían las armas a distribuidores registrados que posteriormente finalizan la compra.
Entre otras armas, en su sitio web se encuentra un AR-15 por mil 870 dólares (37 mil 133 pesos mexicanos) más impuestos, la misma cantidad y número de modelo que se puede ver en el recibo que Ramos supuestamente envió a un joven.
El contacto que compartió el recibo aseguró que Ramos compró el rifle hace ocho días de igual forma, en la conversación le hizo saber al tirador que “las armas son aburridas” a lo que respondió: “no.”
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