“El momento de ayudar es ahora” es una de las frases del médico Ernesto Ramírez, de 37 años, quien desde hace aproximadamente 3 años encontró la fórmula en sus redes sociales @Dr_ErnestoRamirez en Instagram y Facebook, para ayudar a enfermos desamparados no solo en el estado Guárico, sino también en otras entidades del país.
Por Pedro Izzo
Ante la compleja crisis hospitalaria que vive el país y al observar las dificultades que manifestaban sus pacientes para encontrar y comprar las medicinas, un día Ernesto decidió salir del consultorio y probar una estrategia distinta que le permitiera ofrecer un servicio más efectivo a los pacientes, que en su mayoría están en condiciones vulnerables.
¿Qué lo motivó a emprender esta labor social en beneficio de los enfermos?
-Me hacía ruido al inicio de la pandemia que me escribían muchos solicitando consultas, porque todos los servicios de interconsulta estaban suspendidos. Entonces fue cuando empecé a publicar casos de pacientes en mi Instagram para ayudarlos, ya que por diferentes motivos no podían costear sus necesidades de salud.
¿Cómo selecciona los casos que publican en sus redes sociales?
-Siempre me llega un mensaje donde me explican que le han hablado de mí y les dan mi número telefónico o a través de las redes sociales Instagram o Facebook.
¿Usted representa alguna fundación?
-Siempre explico a cada persona que no soy fundación ni institución ni algo político o religioso. Lo poco o mucho que puedo hacer por cada paciente es a través del apoyo que nos brindan personas que ven los casos en las redes sociales.
¿Cuántos pacientes reciben ayuda en un mes?
-En promedio son dos pacientes por semana, aunque ayudamos a muchas personas sin necesidad de publicar en redes, porque son medicamentos o exámenes que conseguimos sin necesidad de publicarlo. Cada publicación se documenta de manera presencial. En días anteriores viajamos a Maturín, por un camino de doce horas para llegar y conocer a Paula, una niña de un año y cuatro meses con un diagnóstico de neuroblastoma estadío 4. Este caso ya está en redes sociales.
¿Quiénes conforman su equipo de trabajo?
-Tengo un camarógrafo a la hora de documentar los casos. Aunque siempre comento que mi equipo son los seguidores de las redes sociales. Simplemente soy un intermediario entre el paciente y las personas que con acciones desean ayudar.
¿Qué organizaciones lo apoyan para cumplir esta labor?
-Son diferentes fundaciones dentro y fuera de Venezuela, que en ocasiones se disponen a colaborar, pero mayormente son personas corrientes aportando su cuota de empatía y disposición.
¿Ha logrado brindar ayuda a pacientes de escasos recursos, en el hospital Ranuárez Balza de San Juan de los Morros?
-Sí, hemos logrado ayudar a pacientes que se encuentran ingresados, y en diferentes oportunidades a la institución concretamente.
En San Juan de los Morros, algunos lo llaman el “médico de los pobres”, ¿qué opina usted de esta distinción?
-Primero es un elogio demasiado grande, y más allá de ese reconocimiento que con tanto cariño me hacen, el compromiso surge con el paciente y conmigo mismo. A la hora de hacer una publicación, ponemos todo el empeño y se tocan diferentes puertas para lograr ese objetivo: lo que se necesite al momento.
¿Cuál es la mayor satisfacción de esta labor que cumple con los más necesitados?
-Las satisfacciones son muchísimas. Ya después de estos dos años, la gente sabe que es real y que todo se hace con la mayor responsabilidad, porque cuando yo empecé las personas no sabían quién era yo, y aunque tuviese las mejores intenciones, sin la ayuda de los demás no sería posible. Por eso hoy es gratificante ver cómo desde cualquier parte del mundo, me escriben porque quieren ayudar.
Si usted fuera una autoridad de salud, ¿qué planes cree necesario para atender la crisis sanitaria en Venezuela?
-Planes, programas, métodos, entre otros, ya están ideados. Solo falta la conciencia de cada quien para hacerlos cumplir y hacer cada día mejor las cosas, desde los distintos niveles en los que se desempeñen.
