Llegarán a fines de mes en los tanqueros iraníes Herby y Serena según documentos vistos por Reuters
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Irán está aumentando los suministros de un grado de crudo clave que Venezuela está utilizando para impulsar la productividad de sus antiguas refinerías y liberar petróleo nacional para las exportaciones, según mostraron documentos vistos por Reuters el martes.
Los dos países sancionados por Estados Unidos han fortalecido la cooperación energética en los últimos años, intercambiando petróleo pesado venezolano y otros productos básicos por gasolina, condensado, piezas de refinería y asistencia técnica iraníes.
El intercambio ha crecido desde mayo, cuando las empresas estatales de ambas naciones firmaron un contrato para renovar la refinería El Palito de Venezuela, luego de trabajos anteriores en la instalación más grande del país.
La petrolera estatal venezolana PDVSA recibirá 4 millones de barriles de crudo pesado iraní este mes, un aumento con respecto a los 1,07 millones de barriles importados en junio y un volumen similar al de mayo, cuando un contrato de suministro con la empresa estatal iraní Naftiran Intertrade Co (NICO ) fue firmado, mostró uno de los documentos.
Se espera que los cargamentos lleguen al puerto venezolano de José a fines de mes en los superpetroleros con bandera de Irán Herby y Serena, según el documento. Los transpondedores de los barcos se registraron por última vez cerca de Fujairah, en los Emiratos Árabes Unidos, el mes pasado, según datos de Refinitiv Eikon.
PDVSA y el Ministerio de Petróleo de Venezuela no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.
PDVSA está refinando el crudo iraní en instalaciones que buscan crudo adecuado para aumentar la producción de combustibles para motores. El suministro también está permitiendo a la empresa estatal liberar sus grados más ligeros para mezclarlos y exportarlos.
Se espera que el petróleo de Medio Oriente ayude a PDVSA a recuperar las existencias de su grado exportable insignia, Merey, el crudo venezolano preferido por las refinerías asiáticas, luego de caer a alrededor de 1 millón de barriles a principios de julio, según los documentos.
PDVSA también continuó importando alrededor de 2 millones de barriles por mes de condensado iraní, lo que ayudó a impulsar la producción de mezclas exportables.
Las exportaciones de petróleo de Venezuela en junio cayeron al nivel más bajo desde octubre de 2020 en medio de reparaciones en el principal puerto petrolero del país y demoras para autorizar envíos luego de los cambios de contrato impuestos por PDVSA que exigen el pago anticipado de la carga.