Alessia Pifferi, una italiana de 37 años, dejó a su hija de casi dos años sola en su casa durante seis días y cuando retornó la encontró muerta de hambre. La mujer se había ido para pasar un tiempo con su pareja en otra ciudad.
Por: Clarín
Todo Italia habla del terrible caso. Los detalles son aberrantes.
Pifferi viajó a Leffe, en Bérgamo, y abandonó a la pequeña Diana, de 16 meses, limpia y con su biberón sobre un catre de camping. A su novio le mintió diciéndole que la había enviado con su hermana a la playa.
Cuando llegó de su viaje encontró el cuerpo de su hija sin vida e inmediatamente le pidió ayuda a un vecino para que llamara a la policía y la ambulancia.
Pifferi no demoró en confesar haberla dejado sola. Admitió que sabía que existía la chance de que las cosas terminaran de la peor manera. “Sabía que podría ir así”, le habría dicho a la policía.
La mujer actualmente está en San Vittore. Según Milano Repubblica, mañana se espera la confirmación de su detención frente al juez. De momento, el cargo del que se la imputa es de homicidio voluntario con el agravante de premeditación y motivos fútiles.
Durante la investigación en la casa de Alessia, la policía notó que la mujer no tenía nada en su heladera. Estaba desempleada y sus vínculos más cercanos eran su novio, una hermana y su madre, quienes viven en regiones diferentes del país.
Del padre de la pequeña Diana no se sabe nada. La mujer nunca supo de quién era su hija. De hecho, se dio cuenta de que estaba embarazada en el momento del parto.
No fue la primera vez que Pifferi dejó sola a la niña. Ya lo había hecho en dos oportunidades. En ambas, Diana había quedado sola en su cuna junto a su biberón y había logrado sobrevivir.
Llamativamente, un día que estaba de vacaciones en Alemania, Pifferi sí mostró preocupación por su hija. Había dejado a su niña al cuidado de su madre y, al enterarse de que Diana se había infectado en el tracto urinario, retornó del otro país y acudió al hospital para ayudarla.
Un bebé abandonado
En febrero de este año, una joven madre de 14 años abandonó a su bebé de tres semanas en una caja de cartón, junto a un árbol. “El que adopte al bebé cuídelo bien, no tiene ninguna enfermedad”, decía la desgarradora nota escrita por la mamá adolescente junto al cuerpito del niño.
En la caja había un par de pañales, un tarro de leche, una mamadera, un jabón de baño, algo de ropa y una frazada.
El tremendo caso ocurrió el 8 de enero en Bolivia. Luego de varias semanas de investigaciones, la policía local descubrió una verdad terrible: la joven había sido violada por su propio padre Tomás Sambrana, de 44 años, y fruto de esa abuso nació el bebé abandonado.
Según la policía, el padre de la joven madre fue quien obligó a su hija a abandonar al recién nacido. Sin embargo, después confesó que violaba a su propia hija y que producto de los vejámenes sexuales la embarazó, informó Doris Leaños, la directora de la Defensoría de la Niñez de Santa Cruz de la Sierra.
La funcionaria aseguró que el abusador le pidió perdón a su hija antes de saber que estaba embarazada. Luego, al enterarse, el padre de la menor hizo todo lo posible para que abortara. Forzó a la adolescente a tomar pastillas e infusiones, pero el bebé logró sobrevivir.
Agregó que “el agresor se encontraba en estado de ebriedad en el momento del hecho”.